Cuando uno piensa en un coche rápido, piensa en superdeportivos, coches pequeños y ligeros, con aerodinámica pensada para atravesar mejor el aire y mantener las ruedas tocando el pavimento al mismo tiempo. Uno no piensa precisamente en un monstruo de varias toneladas y espacio para alojar a toda la familia.

Y sin embargo, esa es precisamente la tendencia del mercado con los SUV deportivos. Para empezar, tenemos el tipo de coche más popular en la actualidad, el SUV; estos son modelos grandes, espaciosos, en los que la posición de conducción es más alta y agradable. En la mayoría de estos modelos, lo importante es disfrutar de una experiencia más relajante y menos claustrofóbica que con un coche normal.

En otras palabras, no son coches pensados para el circuito, o para carreteras muy enrevesadas; es el precio a pagar por el diseño cúbico y el peso de todos esos lujos. Y sin embargo, en el último año hemos visto la llegada de nuevos “SUVs deportivos”, pensados para el conductor que no quiere hacer esos sacrificios. El modelo que mejor representa al SUV deportivo es el Lamborguini Urus; sí, un Lamborguini en el que puedes llevar a toda la familia, pero que también tiene una aceleración de supercoche.

El SUV más veloz del mercado es de Bentley

El Urus ha abierto las puertas a un nuevo tipo sector, y eso no ocurre todos los días. Ya están apareciendo los primeros rivales, dispuestos a protagonizar vídeos de Youtube. Como el nuevo SUV de Bentley: el Bentayga Speed. Como su nombre indica, estamos ante una versión potenciada del Bentayga, uno de los SUV más lujosos y especiales que puedes comprar; tan potenciada, que de golpe y porrazo se ha convertido en el SUV más veloz del mercado.

Y es que el Bentayga Speed tiene una velocidad punta de nada menos que 306 kilómetros por hora, toda una locura para un coche tan grande y pesado como este. Para conseguirlo, Bentley ha potenciado el motor W12 de 6.0 litros (¡!), que hasta ahora “sólo” alcanzaba los 608 caballos, para que alcance nada menos que los 635 caballos; aunque el par motor no cambia, y se queda en los 900 Nm.

Es por eso que la aceleración se queda algo corta respecto al Urus; acelera de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos, frente a los 3,6 segundos del Urus, aunque imaginamos que es un “sacrificio” que más de uno y una aceptaría sin dudarlo. Para mejorar estos tiempos, el Bentayga Speed viene con una transmisión automática de ocho velocidades calibrada para mejorar la respuesta.

¿Merece la pena un SUV deportivo?

El Speed también se diferencia de la plebe con detalles estéticos, como el alerón trasero, que también debería ayudar un poco a estabilizar esta bestia cuando pisemos el acelerador. El Bentley Bentayga Speed aún no tiene fecha de lanzamiento ni precio, pero imaginamos que será muy exclusivo.

Claro, que esto nos lleva a preguntarnos, ¿realmente merece la pena un SUV deportivo, o son todo apariencias? Sinceramente, si vas a conducir este coche en el circuito deberías recordar su peso y su centro de gravedad, más alto que con cualquier otro deportivo. Y es poco probable que vayas a alcanzar los 306 km/h que promete; aunque eso también es cierto con cualquier deportivo, claro.

Puede que esta sea simplemente otra moda más. Pero al menos está dando lugar a algunos de los coches más absurdos que recordamos.