starcraft2

starcraft2

Omicrono

Relacionan los videojuegos de estrategia con una mejora de la actividad cerebral

27 agosto, 2013 21:03

Noticias relacionadas

No pasa un mes sin que en las noticiarios aparezca algún suceso escabroso en el que se culpa a los videojuegos. Desde asesinos con katanas hasta la obesidad, si nos guiásemos por lo que dicen en la televisión, solo con prohibir los videojuegos se solucionarían la mayoría de los problemas de la humanidad. Sin embargo, los estudios científicos suelen apuntar en otra dirección, y destacan el papel de los videojuegos en el desarrollo de los jóvenes e incluso de los pacientes.

Ahora, un estudio de la Universidad de Londres especifica claramente qué beneficios puede conllevar jugar durante un tiempo determinado, y las razones de ello. El estudio se basó en varios tipos de juegos, como el simulador de vida The Sims , pero sobre todo se centró en los juegos de estrategia en tiempo real (RTS), mas concretamente el juego Starcraft, en el que para vencer el jugador debe mantener una atención constante del campo de batalla, y gestionar al mismo tiempo varias fuentes de problemas saltando de una a otra constantemente. Asimismo, el jugador debe pensar rápidamente y reaccionar ante situaciones inesperadas, con cierto grado de improvisación.

aprendizaje-juegos

aprendizaje-juegos

Cada participante en el estudio jugó durante 40 horas al juego, en periodos de una hora cada día, y divididos en grupos dependiendo de los títulos que probaban. Incluso los jugadores de Starcraft se dividieron entre aquellos que jugaban de manera normal, y otros que jugaban en un nivel de dificultad mayor.  Los resultados no son conclusivos, pero apuntan a que los jugadores de RTS mejoraron su flexibilidad cognitiva, es decir, que eran capaces de comprender conceptos y ejecutarlos mas rápidamente que el resto, basándose en unos experimentos de laboratorio que se organizaron después del periodo de juego. Entre los jugadores de Starcraft, se notó claramente la diferencia entre los que lo jugaron en su nivel mayor de dificultad y los que lo hicieron en el normal.

Aún queda mucho trabajo para asociar claramente los videojuegos y la mejora de nuestras capacidades mentales, pero los indicios están ahí. Ahora a los investigadores les queda la difícil tarea de descubrir qué partes y tareas específicas de un juego provocan estos cambios, y qué localizaciones del cerebro son afectadas por ellas.

Fuente | PLOS ONE