Yolanda Rodríguez | Agencias
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Las claves

Rusia ha atacado a Ucrania en los últimos meses con un misil de crucero 9M729, cuyo desarrollo llevó a Estados Unidos a abandonar en 2019 el Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF), durante el primer mandato de Donald Trump, que había suscrito con Moscú, en 1987, según Andrii Sybiha, ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania.

Washington afirmó que el misil violaba el tratado y podía volar mucho más allá de su límite de 500 km (310 millas), aunque Rusia lo negó.

Según sostiene Reuters, las declaraciones de Andrii Sybiha son la primera confirmación de que Rusia ha utilizado el misil lanzado desde tierra 9M729 en combate, ya sea en Ucrania u otro lugar.

La agencia también asegura que Rusia ha disparado el misil contra Ucrania 23 veces desde agosto, y afirma que Ucrania también registró dos lanzamientos del 9M729 por parte de Rusia en 2022, citando a un funcionario ucraniano.

El misil, que puede transportar una ojiva nuclear o convencional, tiene un alcance de 2,500 km, según el sitio web Missile Threat del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington.

Una fuente militar indicó que un 9M729 disparado por Rusia el 5 de octubre recorrió más de 1,200 km antes de impactar en territorio ucraniano.

“El uso por parte de Rusia del 9M729, prohibido por el INF, contra Ucrania en los últimos meses demuestra el desprecio de (el presidente Vladimir) Putin hacia Estados Unidos y los esfuerzos diplomáticos del presidente Trump para terminar la guerra de Rusia contra Ucrania”, aseguró el ministro Sybiha.

También aseguró que Kyiv apoyaba las propuestas de paz de Trump y que Rusia debería afrontar la máxima presión para lograr la paz, señalando que mejorar la capacidad de ataque a larga distancia de Ucrania ayudaría a persuadir a Moscú para poner fin a su guerra en Ucrania.

Ucrania ha instado a Washington a suministrarle misiles de largo alcance Tomahawk, que no estaban prohibidos por el INF porque solo se lanzaban desde el mar en ese momento. Rusia asegura que esto constituiría una peligrosa escalada.

Un asunto de seguridad para la UE

El uso del 9M729 amplía el arsenal ruso de armas de largo alcance para atacar Ucrania y encaja en un patrón de Moscú enviando señales amenazantes hacia Europa mientras Trump busca lograr un acuerdo de paz, afirman analistas militares occidentales.

“Creo que Putin intenta aumentar la presión como parte de las negociaciones por Ucrania”, apuntó a la citada agencia William Alberque, investigador principal adjunto en el Pacific Forum, añadiendo que el 9M729 fue diseñado para alcanzar objetivos en Europa.

Rusia probó su misil de crucero nuclear Burevestnik la semana pasada y el miércoles anunció que había probado un torpedo nuclear llamado Poseidon.

De momento, la Casa Blanca no ha respondido sobre preguntas específicas respecto al uso del misil ruso del 9M729. Sin embargo, el presidente Trump ordenó al ejército estadounidense el jueves retomar las pruebas de armas nucleares, citando “los programas de pruebas de otros países”.

Tras la retirada de EE. UU. del tratado INF, que prohibía misiles lanzados desde tierra con rangos de 500 a 5,500 km, Rusia declaró una moratoria para el despliegue de misiles de alcance intermedio.

La agencia Reuters asegura que revisó imágenes de restos tras un ataque ruso en el que un edificio residencial fue alcanzado y cuatro personas fallecieron en la aldea ucraniana de Lapaiivka el 5 de octubre, a más de 600 km del territorio ruso.

Las imágenes mostraban dos fragmentos del misil, entre ellos un tubo con cableado, ambos marcados con la inscripción 9M729, un detalle que refuerza su identificación. Rusia cuenta con varios misiles capaces de recorrer todo el territorio ucraniano, incluidos los lanzados desde el mar Kalibr y los aéreos Kh-101.

Sin embargo, el 9M729 aporta una diferencia estratégica: puede ser disparado desde plataformas terrestres. El tratado INF prohibía este tipo de misiles porque sus lanzadores son móviles y, por tanto, más fáciles de ocultar.