El Gobierno de España sigue remitiendo al respeto al Convenio entre Estados Unidos y España, cuando habla del uso de las bases militares de Rota y Morón. Nadie va más allá de que se cumplirán los citados acuerdos "bilaterales". Tampoco explican si el embargo aprobado recientemente por el Consejo de Ministros impide o no a EEUU seguir utilizando estas bases para enviar material militar a Israel"
La norma aprobada por el Ejecutivo español "se extiende a todo el material de defensa y a la tecnología de doble uso e incluye la denegación de la solicitud de tránsito para los combustibles con posible uso militar".
Es cierto que el artículo 16 del Convenio entre Estados Unidos y España, establece que las bases de Rota y Morón "estarán bajo mando español". Y subraya que en ellas "Sólo ondearán la bandera y las insignias de mando españolas". O lo que es lo mismo, todo lo que allí ocurre "debe ser autorizado por las autoridades españolas”.
Eso sí, el mismo artículo subraya que "El régimen interior de cada base se regirá, en lo concerniente a la relación bilateral, por normas acordadas entre el mando de la base y el jefe de las Fuerzas de los Estados Unidos de América. Estas normas y sus modificaciones posteriores serán sometidas al Comité Permanente, que podrá no aprobarlas o determinar cambios en las mismas".
Desde el Gobierno español, al ser preguntados por cómo se opera en ellas y si el Pentágono puede utilizarlas para enviar armamento a Israel se limitan a señalar que "España cumple con los tratados internacionales y bilaterales que tiene suscritos", sin entrar en más detalles.
Hoy mismo, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, preguntado por este asunto en RNE, ha vuelto a insistir en que "en el caso de las bases vamos a seguir respetando los acuerdos que tenemos con EEUU y el uso de las propias bases".
Cuerpo ha matizado que desde el Gobierno se "quiere evitar ese paso [de armamento] en acuerdo con EEUU. Hay un diálogo continuado con el uso de las bases", ha señalado. Y ha asegurado que "la intencionalidad es aumentar la presión sobre el Gobierno israelí".
En el mismo sentido, el ministro de Justicia, Félix Bolaños, ha asegurado este lunes que el Gobierno está "en contacto continuo" con las autoridades estadounidenses para evitar que lleguen armas a Israel "porque acaba finalmente utilizándolas contra la población inocente palestina".
"Llegamos lo más lejos que fuimos capaces de acuerdo con la normativa europea, con la normativa española y también con los tratados internacionales, de modo que todo lo que sea ese tránsito por las bases de Rota y Morón, se llevará a cabo conforme a los tratados internacionales, a los compromisos internacionales de España y también en contacto continuo con las autoridades norteamericanas", ha subrayado.
No entran a valorar si el reciente embargo aprobado por el Gobierno respecto a la prohibición de que transite por España material militar con destino a Israel tiene aplicación en las bases de Rota y Morón.
Según el citado Convenio de Cooperación para la Defensa, España no puede limitar ese suministro militar que el Pentágono realiza desde las bases españolas de Rota y Morón.
Pese a la polémica, Estados Unidos tampoco ha sido muy beligerante sobre este asunto. Las únicas declaraciones sobre este tema, fueron realizadas por el portavoz del Departamento de Estado el pasado día 9 de septiembre, cuando calificó de “profundamente preocupantes” las nueve medidas anunciadas por el presidente Pedro Sánchez para presionar al Gobierno de Netanyahu, antes del real decreto aprobado por el Consejo de Ministros.
Una de las citadas medidas anunciadas por Sánchez consistía en la “denegación de entrada al espacio aéreo español a todas aquellas aeronaves de Estado [incluidas las fletadas por el Pentágono] que transporten material de defensa destinado a Israel”.
Ambigüedad
El artículo 25 del convenio prevé que "Las aeronaves de las Fuerzas de los Estados Unidos de América desplegadas en España con carácter permanente o rotativo [...] pueden sobrevolar, entrar y salir del espacio aéreo español y utilizar las bases [...] sin más requisitos que el cumplimiento de la reglamentación española de circulación aérea". Eso sí, dicha autorización tiene una importante salvedad: se excluye a las que transporten “personalidades, mercancías peligrosas, pasajeros o carga que pudieran ser controvertidos para España”.
Y evidentemente, tras la aprobación del real decreto ley con medidas urgentes contra el genocidio en Gaza y de apoyo a la población palestina, este tipo de mercancías son "controvertidas" para nuestro país.
En estos supuestos requieren una autorización específica. Aunque, lo habitual, según informa el diario El País "es que no se solicite formalmente si se sabe que no se va a conceder".
Washington puede utilizar otras bases, además de las españolas para hacer entrega de material bélico a Israel, como ha ocurrido con los seis F-35 entregados a los israelíes en marzo y abril. Estos evitaron Rota y Morón, haciendo escala en las Azores antes de cruzar en vuelo el Estrecho de Gibraltar.
También, por motivos de seguridad, el Departamento de Defensa de EEUU sí debe informar a España sobre la existencia de munición o explosivos en tránsito. Incluso el artículo 32 de ese convenio estipula que las Fuerzas estadounidenses "solicitarán autorización de las autoridades españolas a través del Comité Permanente" para “carga o descarga de municiones y explosivos” y su transporte por vía terrestre, marítima o aérea.
Pero como ya publicamos en EL ESPAÑOL, España no inspecciona los aviones de transporte o los buques estadounidenses que hacen escala en las bases españolas. Prima la confianza entre aliados.
EEUU suele utilizar, además de las citadas bases españolas, puertos en Chipre y, ocasionalmente, bases en Italia y Alemania para suplir a Israel, adaptando sus rutas logísticas en función de la situación militar y las leyes europeas.
Gaza: un negocio para EEUU
La magnitud de la destrucción y los crímenes de guerra en Gaza no sería posible sin este flujo constante de armas desde EEUU. Y como han venido denunciando desde algunos medios, dichas operaciones se han mantenido de manera deliberadamente secreta para evitar el escrutinio público e impedir que el Congreso ejerza una supervisión significativa.
Mientras Canadá, Reino Unido, Francia y otros 150 países más —entre los que se incluye España— reconocen el Estado palestino, el apoyo de la Casa Blanca a Netanyahu se mantiene pleno y sin viso alguno de fisuras.
El último movimiento de Trump al respecto sigue la senda marcada desde que tomó posesión de su segundo mandato en enero. La Administración republicana se encuentra buscando la aprobación del Congreso estadounidense para vender 5.300 millones de euros de armamento a Israel.
Según recoge WSJ, el paquete planeado incluye un acuerdo por valor de 3.200 millones de euros para 30 helicópteros de ataque Apache y otros 1.600 millones para 3.250 vehículos de combate de infantería.
Por otro lado, la AFSC (American Friends Service Committee), dedicada a promover la paz, la justicia social y la ayuda humanitaria en diversas partes del mundo, viene denunciando de forma reiterada que tanto la administración Biden como la de Trump han tramitado más de 14.000 millones de dólares adicionales en armas para Israel, además de los 3.800 millones que ya se entregan anualmente en ayuda militar. Un dinero que Israel está obligado a gastar en comprar armamento fabricado en EEUU.
