La ceremonia de puesta a flote del S-82 Narciso Monturiol, el segundo submarino de la clase S-80, tendrá que esperar para después del verano, han confirmado fuentes de Navantia. Desde el astillero público han subrayado que el aplazamiento de la flotadura, prevista originalmente para este 21 de julio en sus instalaciones de Cartagena (Murcia), se debe a "motivos de agenda".
No obstante, la empresa ha asegurado que este retraso no afectará el calendario de hitos previsto para el sumergible ni tampoco a la maniobra, que se llevará a cabo después de la época estival, tal como estaba programado en un principio.
En este sentido, las fuentes consultadas han señalado que la puesta a flote del S-82 es tan solo un evento cuyo propósito es el amadrinamiento del submarino, por lo que es independiente de la maniobra de puesta a flote.
Según trascendió semanas atrás, la madrina del nuevo miembro de la familia S-80 será la esposa del JEMAD, almirante general Teodoro López Calderón. Cuatro años atrás, en la flotadura del S-81 Isaac Peral, el amadrinamiento recayó en la princesa Leonor.
En cambio, Navantia ha apuntado que la botadura de la primera fragata de la clase F-110, la F-111 Bonifaz, previsiblemente se realizará también en septiembre en el astillero de la empresa en Ferrol (A Coruña).
Navantia se vio obligada a modificar el calendario de entregas de los restantes tres submarinos S-80, a mediados del año pasado, aquejada por los retrasos en el suministro de materiales. De esta manera, tras la entrega del S-82 a la Armada, que se prevé para 2026, el S-83 Cosme García y el S-84 García de los Reyes no llegarán hasta 2028 y 2029, respectivamente.
Sin embargo, desde el Ministerio de Defensa recalcaron entonces que este nuevo cronograma no solventaba la preocupación del Gobierno respecto a las reiteradas demoras del proyecto, en el que España ha invertido hasta la fecha 3.900 millones de euros.
Por su parte, el S-81 Isaac Peral, que ya se encuentra en servicio y a pleno rendimiento, participó en su primera misión junto a la OTAN, el pasado abril. Desde la fuerza naval española aseguraron que el despliegue del buque había sido todo un éxito.