El Consejo de Ministros celebrado este martes ha dado luz verde al techo de gasto para llevar a cabo 17 Programas Especiales de Modernización integrados dentro del Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa. Se trata de una serie de proyectos impulsados por Defensa para la modernización y adquisición de nuevas capacidades para las Fuerzas Armadas española.
Estos 17 programas se suman a los 14 aprobados hace unas semanas y llega pocos días después de que Sánchez firmara el compromiso de la OTAN para alcanzar el 5% de gasto en defensa respecto al PIB. Algo que, nada más salir de la reunión celebrada en La Haya, negó el propio presidente.
De igual manera, en la comparecencia en la Comisión de Defensa del Congreso del lunes, la ministra Robles afirmó que España se gastará el 2,1% al mismo tiempo que cumplirá con los objetivos fijados por la OTAN.
Entre este baile de cifras y porcentajes, el Plan Industrial se aprobó igualmente en Consejo de Ministros el pasado abril, suponiendo una inversión adicional de 10.471 millones de euros y alcanzando la cifra de 33.123 millones para este mismo ejercicio de 2025.
Los objetivos son "garantizar la seguridad de España en un contexto geopolítico y tecnológico cambiante, consolidar a nuestro país como un miembro central de la Unión Europea y de la Alianza Atlántica e impulsar una nueva ola de innovación y reindustrialización", explican en la nota del Consejo de Ministros.
Recreación del caza FCAS
Para llevar a cabo este Plan Industrial, el Ministerio de Defensa se apoyará en un total de 5 pilares. El más cuantioso en términos económicos —con un 35%— será la mejora de las condiciones laborales de la tropa y marinería, así como "la preparación y el equipamiento de las Fuerzas Armadas".
El segundo pilar se destinará al desarrollo y adquisición de nuevas capacidades de telecomunicaciones y ciberseguridad, con un 31%. El tercero para la fabricación y adquisición de nuevos equipos de defensa y disuasión por un porcentaje del 19%.
El cuarto pilar, que abarcará el 16,73% de la inversión total, se destinará al refuerzo de las capacidades duales de las Fuerzas Armadas. Y el quinto, con un 3%, se destinará a mejorar las condiciones de seguridad de los casi 3.000 efectivos que integran las 16 misiones de paz que actualmente realiza España en el exterior.
Según el documento donde se detalla el Plan Industrial, publicado en abril, al impulso de Programas Especiales de Modernización (PEM) se dedicará un total de 3.807 millones de euros a repartir entre las 31 iniciativas. Además, estas se unirán a las más de 50 que Defensa tiene actualmente en curso.
Fragata española Álvaro de Bazán.
Los PEM destacados por el Ministerio de Defensa, en algunas ocasiones, se encuentran ya en marcha, mientras que en otros la dotación económica tan sólo irá dedicada a los primeros estudios y análisis.
Aire y espacio
La rama del aire cuenta con algunos de los programas más importantes de todo el Plan Industrial. Entre los más destacados e inmediatos se encuentra el Sistema de Enseñanza Integrado de Vuelo Avanzado para el Ejército del Aire y del Espacio.
Los F-5 basados en Talavera la Real (Badajoz) se encuentran en sus últimos años de vida proporcionando instrucción avanzada de caza a los futuros pilotos de F-18 y Eurofighter. Para su relevo, el modelo mejor posicionado hasta el momento es el Hürjet, el caza de entrenamiento de Turkish Aerospace Industries (TAI), que hizo acto de presencia en la feria madrileña Feindef.
El pasado mayo se firmó un memorando de entendimiento entre TAI y un conglomerado de compañías españolas, liderado por Airbus, para la participación nacional con algunos sistemas dentro del caza.
TAI Hürjet en la exposición estática de FEINDEF
Según el PEM publicado por Defensa, tiene previsto incorporarse entre 28 y 30 aeronaves junto a un sistema integral de entrenamiento. Por el momento, se desconoce cuándo se firmará la adquisición en firme.
En la misma rama aérea, otro de los PEM presentados es el Sistema Integral Aéreo de Última generación. Se dedicarán 216 millones para la maduración tecnológica de los distintos paquetes de trabajo del programa Sistema de Armas de Nueva Generación (NGW), que forma parte del FCAS.
Otro de los planes incluidos son la sustitución en dos fases de helicópteros ligeros por el nuevo H135 de Airbus Helicopters y la sustitución por obsolescencia de los aviones CASA C-212 Aviocar que sirven en la Escuela Militar de Paracaidismo Méndez Parada y en Ala 37. Así como la adquisición de varios sistemas aéreos no tripulados para misiones de inteligencia y vigilancia.
En la parte espacial, se asigna un total de 200 millones de euros para el Sistema Espacial de Observación de la Tierra (SEOT), protagonizados por los PAZ II de Hisdesat. Se trata de un conjunto de dos nuevos satélites con tecnología de radar de apertura sintética para, fundamentalmente, labores de inteligencia.
Representación artística del satélite Paz.
En cuanto a PAZ II, Defensa ya ha publicado un contrato con un valor estimado de 900 millones de euros en el que se incluye la fabricación de los dos satélites, su lanzamiento y operación hasta el 31 de agosto de 2042.
Tierra
En cuanto a la parte terrestre, uno de los programas más importantes es el impulso al programa de Vehículo de Apoyo Cadenas (VAC) que tiene el objetivo de reemplazar al Transporte Oruga Acorazado (TOA).
Defensa asignó la fabricación del VAC a Tess Defence, un conglomerado de compañías conformado por Santa Bárbara Sistemas, Indra, Sapa y EM&E por un importe de casi 2.000 millones de euros y cuya primera fase se compone de un total de 394 unidades.
El Plan Industrial recoge el desarrollo de un Sistema de Combate Terrestre Superior que sustituya, para el año 2040, a los carros de combate Leclerc y Leopard. Esta partida está compuesta por una dotación económica de 50 millones de euros.
VAC en su presentación en FEINDEF
En la misma línea, se plantea la adquisición de un sistema Obús Autopropulsado de ruedas como sustitución al obús de cadenas M-109 A5, actualmente en servicio en el Ejército de Tierra.
También se establece la actualización de los carros Pizarro, la adquisición de vehículos de exploración y reconocimiento para Ceuta y Melilla, la compra de sistemas antidrones y la incorporación de nuevos vehículos lanzapuentes capaces de proporcionar movilidad a los Dragón.
Naval
Otro ámbito de los Programas Especiales de Modernización es la parte marítima. Defensa explica la necesidad operativa de una plataforma naval que sustituya al buque Alerta, la embarcación de la Armada dedicada a labores de inteligencia y que lleva en servicio desde 1992.
Este nuevo buque será fundamental para el sistema de inteligencia Santiago, reimpulsado por el Ministerio hace un par de años, en el que participan también el Ejército de Tierra y el Ejército del Aire y del Espacio.
El reemplazo del buque Patiño también se encuentra inscrito en los PEM. Se llevará a cabo la construcción de una nueva embarcación de aprovisionamiento de combate según el modelo BAC Cantabria, desarrollado por Navantia, actualmente en servicio.
También se impulsará un Sistema Integral de Proyección Anfibia Eficiente mediante la adquisición de un vehículo de apoyo de cadenas para Infantería de Marina que reemplace a los "obsoletos AAV-7A1", explican en el documento del Plan Industrial.
Nuevo Buque de Aprovisionamiento de Combate
Se llevará a cabo la modernización de media vida de las fragatas clase Álvaro de Bazán, las conocidas por su designación F-100. Navantia se encuentra a pocos meses de la botadura de la primera unidad de F-110, que tiene previsto la entrada en servicio en 2028.
A partir de ese momento, las primeras F-100 podrían pasar por su proceso de modernización, donde se tiene planeado la integración de algunos sistemas clave. Para este fin, Defensa ha designado una dotación de 225 millones de euros.
Otros de los programas vigentes contemplan la modernización de capacidades de los buques anfibios, la adquisición de sistemas de lanzamiento para embarcación que proporcionen defensa antimisiles o la adquisición de un buque hidrográfico oceánico.
Otros proyectos
El resto de PEM, hasta llegar a los 31, se componen fundamentalmente de sistemas de comunicaciones, conectividad para entornos de misiones militares, sistemas de cifrado o modernización de algunas tecnologías como antenas o captadores integrados en vehículos.
Avión anfibio modelo DHC-515
Otro de los aspectos destacados es la adquisición de 5 radares de localización de orígenes de fuego indirecto, el desarrollo de un sistema integral de ciberseguridad avanzada y modernizar los 18 sistemas actuales del ET a un único sistema de control de la batalla en tiempo real.
Otras aportaciones del Plan Industrial, ya fuera de la rama de defensa, tiene como protagonistas a la adquisición de DHC-515 como aviones apagafuegos, el aumento de los presupuestos del CNI y del INTA, o la creación de líneas de financiación del CDTI.