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El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha anunciado este lunes que ha dado orden al Ejército de preparar un plan para establecer una nueva "ciudad humanitaria" en las ruinas de la urbe de Rafah, donde pretende hacinar a toda la población gazatí, según recoge The Times of Israel.



Según Katz, esta nueva zona humanitaria que se construiría sobre las ruinas de esta zona al sur de la Franja de Gaza albergaría inicialmente a unos 600.000 palestinos que actualmente malviven en la zona costera de Al Mawasi.

"A los palestinos no se les permitirá abandonar la zona", ha dicho Katz. Es por ello que ha alentado a la población palestina a “emigrar voluntariamente” de la Franja de Gaza a otros países, enfatizando en que este plan “debería cumplirse”.

Más de un millón de gazatíes han llegado a esta zona durante estos meses tras ser desplazados forzosamente por el Ejército de otros puntos del enclave. El objetivo de Israel es que toda la población gazatí (poco más de dos millones) quede concentrada en este punto.

Antes de entrar en la zona, pasarían por un control de seguridad en el que las FDI examinarían si son "agentes de Hamás".



El anuncio de Katz llega horas antes de que se reúnan el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el presidente estadounidense, Donald Trump, aborden el acuerdo de alto el fuego para Gaza que, de momento, contempla 60 días de tregua durante los cuales se realizarán intercambios de rehenes por presos palestinos.

El titular israelí de Defensa ha afirmado que, si las condiciones lo permiten, la construcción de esta nueva "ciudad" comenzaría durante el alto el fuego.

Sin embargo, la negativa de Israel a permitir la entrada libre y segura de ayuda a Gaza está estancando las conversaciones de alto el fuego que se celebran en Qatar, según han afirmado este lunes fuentes palestinas a Reuters.

Detalles del plan "humanitario" que hacinará a los gazatíes

Según el plan ideado por Katz, la idea es traer a toda la población civil palestina a la zona mientras las Fuerzas de Defensa de Israel la protegen a distancia, mientras organismos internacionales trabajan para gestionarla.

Allí, establecerían cuatro puntos adicionales de distribución de ayuda en la zona, según Katz. Sin embargo, no ha especificado qué organizaciones internacionales operarían la ciudad.

Aparte de la Fundación Humanitaria de Gaza, respaldada por Israel y Estados Unidos, es poco probable que alguna coopere, dado que el plan pretende desplazar a toda la población palestina de la Franja.

Esta fundación, encargada desde finales de mayo de la distribución de la comida en la Franja, es objeto de polémica ya que todos los días se registran muertes de gazatíes por disparos del Ejército mientras esperan para recibir la ayuda.

Los gazatíes muertos en la Franja a manos del Ejército de Benjamin Netanyahu superan los 57.000, según el recuento del del Ministerio de Salud de Gaza, controlado por el movimiento islamista.