Ucrania ha registrado durante la noche del sábado un nuevo ataque aéreo ruso masivo dejando al menos un muerto, un piloto del ejército, y seis personas heridas en la ciudad de Smila, en el centro del país. Las víctimas mortales en Ucrania por ataques rusos en esta semana se elevan a 36.
Kiev asegura que la Fuerza Aérea ucraniana derribó 475 sistemas lanzados por Rusia, entre drones y misiles. Según un comunicado publicado en Telegram, Rusia lanzó 537 sistemas en total, de los cuales 477 fueron drones 'Shahed' de fabricación iraní, 46 misiles balísticos, once misiles balísticos y tres misiles antiaéreos.
En las tareas defensivas, un piloto ucraniano llamado Maksym Ustymenko ha perdido la vida al resultar dañada su aeronave F-16 mientras repelía un ataque, ha informado el Mando de las Fuerzas Armadas del Ejército del Aire en su cuenta de Facebook.
El piloto utilizó todas sus armas de a bordo y derribó siete objetivos aéreos. Al derribar el último, el F-16 sufrió daños y comenzó a perder altitud.
Por otro lado, en la ciudad de Smila, las autoridades han registrado seis heridos, incluido un menor, en un ataque contra edificios residenciales con drones y misiles. Según datos preliminares, tres edificios de nueve pisos han resultado dañados.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha denunciado el ataque masivo aéreo: "La aviación ucraniana está protegiendo heroicamente nuestros cielos. Agradezco a todos los que defienden a Ucrania. Moscú no se detendrá mientras tenga la capacidad de lanzar ataques masivos", ha escrito en su cuenta de la red social X.
"Solo esta semana, se han disparado más de 114 misiles, más de 1270 drones y casi 1100 bombas planeadoras", recuenta el mandatario ucraniano.
"Ucrania necesita fortalecer su defensa aérea, lo que mejor protege vidas", añade haciendo referencia a los misiles Patriots que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está sopesando enviar a Ucrania y que Zelenski "está dispuesto a adquirir".
Nuevo ataque masivo desde Moscú
La agencia de noticias ucraniana Ukrinform informaba de que se produjeron explosiones en varias ciudades del país, como Leópolis, en el oeste de Ucrania, ciudad que sufrió un ataque combinado con drones y misiles contra infraestructura crítica.
El Ayuntamiento de dicha ciudad ha informado de que no hay víctimas civiles.
Anteriormente, durante la noche del viernes, las autoridades ucranianas informaban de la muerte de un matrimonio en un ataque ruso contra un edificio residencial de la ciudad de Odesa -al sur de Ucrania-, que también dejó nueve heridos, entre ellos un niño de siete años y un bebé.
Según datos de la Fuerza Aérea, los militares ucranianos derribaron 22 de los 23 drones con los que Rusia atacó el territorio de Ucrania.
Por su parte, las defensas antiaéreas rusas derribaron durante esa misma noche 56 drones ucranianos lanzados contra la anexionada península de Crimea, según el Ministerio de Defensa de Rusia.