Bruselas

A falta de cuatro meses para que se cumpla el plazo fijado de dos años, la Unión Europea sólo ha repartido entre sus países miembros a 18.418 demandantes de asilo llegados a Italia y Grecia. Se trata del 11,5% de los 160.000 comprometidos en septiembre de 2015, en pleno apogeo de la crisis de refugiados. Las cifras de España son todavía peores: el Gobierno de Mariano Rajoy sólo ha acogido en un año y seis meses a 886 solicitantes de protección internacional, el 5,4% de la cuota que había aceptado, según los últimos datos de Bruselas

Por primera vez, la Comisión Europea ha alzado la voz y ha decidido este martes señalar públicamente a los incumplidores. Su principal aviso se dirige contra Hungría y Polonia, dos países que no sólo no han reubicado ni a una sola persona, sino que además han denunciado el sistema de cuotas ante el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) por considerar que invade competencias nacionales. "Esta situación constituye una conculcación de sus obligaciones jurídicas, de los compromisos contraídos con Grecia e Italia y del reparto equitativo de las responsabilidades", dice Bruselas.

Si en el plazo de un mes los Gobiernos euroescépticos de Budapest y Varsovia no rectifican, el Ejecutivo comunitario les abrirá un expediente sancionador. "Es un ultimátum", ha anunciado el comisario de Inmigración, Dimitris Avramopoulos. "Hemos agotado todas las alternativas, hemos estado esperando una respuesta positiva (de estos países) durante los últimos doce meses, pero ahora estamos llegando al final. Todos los Estados miembros deben cumplir sus compromisos", avisa Avramopoulos.

Los países del este, los que más resisten

Tampoco Austria ha acogido hasta ahora a ningún refugiado procedente de Italia o Grecia, los países más afectados por la crisis. El Gobierno de Viena alegaba sufrir una fuerte presión por los sirios que llegaban al país a través de la ruta de los Balcanes. Pero la ruta se cerró hace ya más de un año. Ahora, las autoridades austriacas se han comprometido a acoger de inmediato a 50 migrantes desde Italia para escapar de las sanciones de Bruselas. 

En el punto de mira de la Comisión está además la República Checa, que sólo ha recibido a 12 refugiados y hace ya casi un año que no participa en el reparto. Por su parte, Eslovaquia (16 acogidos) y Bulgaria (29) plantean requisitos excesivos para seleccionar a los candidatos. Es decir, los países del este siguen siendo los que más se resisten a las cuotas de demandantes de asilo. Pero no los únicos.

En la lista de malos alumnos de Bruselas se encuentran también España, Bélgica, Croacia, Alemania, Rumanía, Francia y Chipre. A todos estos países, el Ejecutivo comunitario les reclama que aumenten "significativamente" su oferta mensual de plazas para acoger a refugiados y que reduzcan su tiempo de respuesta cuando les llega una petición de reubicación desde Grecia e Italia.

La Comisión tampoco ahorra críticas al Gobierno de Roma. Italia debe acelerar urgentemente los procedimientos de identificación y registro de todos los candidatos tan pronto como sea posible, así como garantizar que aquellos que llegan a Italia y pueden optar a la reubicación sean conducidos de forma ordenada a nodos centrales de reubicación específicos.

Bruselas asume ya que será imposible cumplir el compromiso de 160.000 reubicados y propone una cifra alternativa mucho más modesta. Se conforma con repartir de aquí a septiembre a los 12.400 refugiados que se encuentran en Grecia (una cifra que no aumentará gracias al acuerdo con Turquía) y a alrededor de 4.300 demandantes de asilo llegados a Italia. En total, otras 16.700 personas. Pero esta meta tampoco se alcanzará si los Gobiernos no aceleran la acogida en los próximos meses.

Noticias relacionadas