Al menos cuatro personas han muerto en una serie de atentados bomba registrados en cinco ciudades de Tailandia, que la policía vinculó este viernes con los movimientos separatistas del sur del país. 

Dos personas fallecieron en al menos 12 explosiones ocurridos en el enclave turístico de Hua Hin, donde se han registrado hasta cinco deflagraciones, una en la sureña provincia de Trang y otra en Surat Thani. Esta última localidad padeció, el pasado mes de abril, la explosión de un coche bomba en el garaje de un centro comercial causando siete heridos y daños materiales . 

Más de 35 personas han resultado heridas, según el balance de los medios locales, en las nueve explosiones que desde el jueves han azotado al país. Entre los heridos, señala Efe, hay al menos diez extranjeros (cuatro alemanes, tres holandeses, dos italianos y un austríaco), todos ellos presentes en el enclave turístico de Hua Hin, a unos 150 kilómetros de Bangkok, durante la explosión del jueves por la noche.

"Las bombas son un intento de generar caos y confusión", afirmó el primer ministro y jefe de la junta militar, Prayut Chan-ocha, al tiempo que pidió calma y aseguró que mantenían el control de la situación durante una comparecencia con los medios, según la agencia de noticias local TNA.

El general, que usurpó el poder mediante un golpe de Estado incruento en 2014, indicó que no era el momento de presionar a la autoridad, sino de colaborar con ella.

Cadena de explosiones

La serie de atentados comenzó la tarde del jueves cuando una bomba estalló en un mercado de la capital de la provincia de Trang, situada en el sur de Tailandia, con un balance de un muerto y siete heridos.

La víctima mortal es uno de los vendedores del zoco, un tailandés de 51 años, que falleció en la mesa de operaciones de un hospital, según el diario local "Bangkok Post". Horas más tarde, un artefacto explosivo era detonado a distancia en una céntrica calle de la ciudad de Hua Hin, uno de los destinos turísticos del país y situado a unos 150 kilómetros al suroeste de Bangkok.

Las autoridades y decenas de curiosos se acercaron al lugar del suceso cuando una segunda bomba, escondida en un macetero, fue activada. Este segundo explosivo mató a una mujer tailandesa e hirió a otras 21 personas, entre ellos varios extranjeros.

Las asistencias sanitarias han atendido a los afectados de los atentados. Reuters

Un portavoz de la policía de Hua Hin confirmó a Efe que la investigación del suceso "continúa" mientras se investigan los vínculos entre los atentados y los movimientos de insurgencia musulmán que actúan en el sur del país. "Las bombas, detonadas a distancia con un teléfono móvil, son del mismo tipo de las que utilizan los insurgentes en el sur de Tailandia", declaró el oficial por teléfono.

Ya en la mañana del viernes, otras dos explosiones golpearon de nuevo Hua Hin, en las que murió al menos una persona y varios resultaron heridas, entre ellos se encuentran cuatro alemanes, tres holandeses, dos italianos y un austríaco. Otra bomba fue descubierta por las autoridades, que procedieron a realizar una explosión controlada.

En la ciudad de Surat Thai, a unos 640 kilómetros al sur de Bangkok, dos artefactos explosivos colocados frente a una comisaría de la ciudad causaron la muerte de una trabajadora local y tres heridos. Según los medios locales, otra explosión hirió a una persona en la turística ciudad de Phuket, en la costa oeste del país. Nadie ha reclamado la autoría de las explosiones.

Estos acontecimientos recuerdan al ataque perpetrado cerca de un santuario situado en un distrito céntrico de Bangkok, segando la vida de 21 personas e hiriendo a más de un centenar, por lo que se convirtió en el peor atentado que ha sufrido el país asiático.

La embajada española recomienda precaución

La Embajada de España en Tailandia, ubicada en la capital, Bangkok, ha advertido este viernes a los españoles residentes o de turismo en el país que se mantengan "alerta" y extremen la precaución, después de que una cadena de atentados sacudiera el sur, muchos de ellos perpetrados en zonas turísticas.

 "La situación es volátil e impredecible y no se puede descartar que se produzcan nuevos atentados", ha advertido la Embajada. "Ahora mismo hay un alto riesgo de nuevos atentados. Recordamos que las autoridades tienen capacidad y competencias para establecer medidas de control y seguridad, cortes o controles policiales en las calles, evacuación de edificios, así como otras medidas de excepción".

"Residentes y turistas en Tailandia, manteneos alerta, evitad aglomeraciones y lugares públicos y extremad la precaución", es el llamado desde Bangkok. Asimismo, han recordado un número de teléfono de emergencias (081 868 7507) en el que los españoles pueden contactar con la Embajada.