Estados Unidos vive unos momentos de tensión política sin precedentes recientes a menos de una semana de que se lleve a cabo la ceremonia formal de traspaso de poder, prevista para el 20 de enero, en la que Biden asumirá la Presidencia.

Las autoridades han efectuado ya un enorme despliegue policial en Washington, con más de 10.000 efectivos, y levantando vallas en torno al Capitolio, en cuyas escalinatas se llevará a cabo la ceremonia de investidura, para evitar las escenas de la caótica jornada del pasado miércoles que dieron la vuelta al mundo.

La decisión, adoptada por el secretario del Ejército de Estados Unidos, Ryan McCarthy, se produce cuando el FBI advirtió sobre las protestas armadas que se están planificando en Washington en los días previos a la ceremonia de inauguración de la presidencia de Joe Biden, que se celebrará 20 de enero.

Funcionarios estadounidenses señalaron de forma anónima a la agencia Reuters que no saben cuántos efectivos irán armados pero las tropas de la Guardia Nacional que ayudan a asegurar el edificio del Capitolio sí acudirán armadas.

Uno de los funcionarios indicó que las tropas no acuden al Capitolio como primera línea de defensa pero sí apoyarán a las agencias y fuerzas de seguridad estatales. Dada la amenaza en torno al Capitolio tras los acontecimientos del pasado miércoles, las tropas acuden equipadas con sus armas para la autodefensa.

La Cámara de Representantes de EEUU ha dado luz verde a un segundo juicio político contra el presidente Donald Trump tras el violento asalto al Capitolio del pasado miércoles de una turba de sus seguidores, en el que murieron cinco personas.

Los demócratas, con mayoría en la Cámara Baja, acusan al mandatario del cargo de "incitación a la insurrección". A ellos se han unido diez miembros del partido republicano.

Efectivos de la Guardia Nacional en el interior del Capitolio. Reuters

Por otra parte, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, descartó este martes que vaya a invocar la Enmienda 25 de la Constitución para destituir al presidente saliente, Donald Trump, después del violento asalto al Capitolio por parte de seguidores del gobernante.

"No creo que tal curso de acción sea en el mejor interés de nuestra Nación o sea consistente con nuestra Constitución", señaló Pence en una misiva dirigida a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, cuando esa instancia se dispone a votar una resolución que insta al vicepresidente a activar ese procedimiento.

El Estado Mayor reconoce a Biden

Además, el Estado Mayor Conjunto de EEUU, que reúne a los principales generales del Ejército, condenó este martes el asalto violento al Capitolio y reconoció que el próximo 20 de enero el demócrata Joe Biden se convertirá en el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas del país.

"El 20 de enero de 2021, de acuerdo con la Constitución, confirmado por los estados y las cortes y certificado por el Congreso, el presidente electo Joe Biden tomará posesión y se convertirá en nuestro 46 comandante en jefe", señalaron los generales en un memorándum citado por medios locales.

La declaración se conoció casi una semana después de que seguidores del presidente saliente, Donald Trump, irrumpieran en el emblemático complejo del Legislativo estadounidense.

El asalto ocurrió cuando los legisladores procedían a certificar la victoria electoral de Biden que Trump ha cuestionado al denunciar, sin presentar pruebas, que fue víctima de un fraude en los comicios de noviembre pasado.

El mando militar consideró igualmente que los hechos del pasado 6 de enero constituyen "un asalto directo al Congreso de Estados Unidos, al edificio del Capitolio y a nuestro proceso constitucional".

El presidente electo de EEUU, Joe Biden, comparece para condenar el asalto trumpista al Capitolio.

"Apoyamos y defendemos la Constitución. Cualquier acto que perturbe el proceso constitucional no sólo va contra nuestras tradiciones, valores y juramento, sino también en contra de la ley", reza el documento.

Los integrantes del Estado Mayor indicaron que las acciones en el Capitolio fueron "incompatibles con el Estado de derecho" y subrayaron que apoyan y defienden la Constitución.

"Como miembros del servicio, debemos encarnar los valores e ideales de la nación", agregaron y llamaron a los hombres y mujeres que integran las Fuerzas Armadas a estar preparados, mantener la vista en el horizonte y permanecer enfocados en la misión.

El FBI alertó el lunes en un boletín interno sobre la amenaza de "protestas armadas" en todo el país desde el sábado, de un "levantamiento" a nivel nacional y de un nuevo intento de asalto al Capitolio desde el domingo y hasta la toma de posesión de Biden.

De cara a la ceremonia de toma de posesión, Washington se reforzará con más de 10.000 miembros de la Guardia Nacional para garantizar la seguridad.