Más de 100 millones de dólares invirtieron los donantes privados en la investidura de Donald J. Trump para que el flamante presidente de Estados Unidos asumiera el cargo por todo lo alto hace dos años. 

Se gastaron 10.000 dólares en maquillaje para 20 ayudantes en un evento inaugural de la noche. Se pagaron 30.000 dólares en dietas para el staff contratado, además de cubrir la totalidad de sus habitaciones de hotel, sus pedidos de servicio de habitaciones, incluidos algunos de lavandería, los billetes de avión y viajes en taxi.

La factura del Hotel Trump International fue de más de 1.5 millones de dólares. Los detalles de los gastos, publicados por The New York Times y que no se habían hecho públicos hasta ahora, muestran que, en 72 días, se gastaron alrededor de 100 millones de dólares, cerca del doble de lo que gastaron Barack Obama o George W. Bush para su primera y segunda investidura presidencial.

La divulgación de estos detalles se produce en un momento en que el comité se enfrenta a una investigación legal sobre las donaciones que lo financiaron.

Por ley, cada donación debe estar documentada junto de la Comisión Federal de Elecciones (FEC), y los informes del equipo Trump están siendo investigados por los fiscales federales en Manhattan y Brooklyn. Los investigadores también están averiguando si hubo donaciones extranjeras, ilegales en los Estados Unidos, que pudieran haber pasado a través de ciudadanos estadounidenses, y si hubo donaciones que no se registraron.

El comité se ha defendido, diciendo haber investigado a todos sus donantes, pero que poco podían hacer para demostrar que el dinero de alguien era realmente suyo. 

"Las finanzas (del comité) fueron totalmente auditadas internamente e independientemente y fueron contabilizadas. Los nombres de los donantes se proporcionaron a la FEC y han sido públicos durante casi dos años. Estos donantes se investigaron de conformidad con la ley y no se han encontrado irregularidades en la investigación de esos donantes", han dicho en un comunicado.

El comité de investidura de Trump fue investigado en el pasado por sus altos gastos administrativos y logísticos. Los nuevos detalles ayudan a concretar cómo se gastó el dinero. Entre los pagos se incluyeron a más de 2 millones de dólares en publicidad online para intentar atraer a una multitud de estadounidenses a la ceremonia.

El Trump International Hotel recibió un pago de más de 1,5 millones de dólares por servicios que incluyen el uso de un salón de baile y un "anexo", según los registros. 

La mayor parte del dinero provino de grandes corporaciones, como AT&T, Bank of America y Pfizer, y donantes republicanos acaudalados, como Sheldon G. Adelson y Andrew Beal. Pero The New York Times dice también que los fiscales federales están investigando si personas de países extranjeros canalizaron donaciones ilegales en un intento de comprar "influencia sobre la política estadounidense".

El periódico, citando fuentes cercanas a la investigación, dice que se centran en personas de países de Oriente Medio, incluidos Qatar, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, y si "utilizaron donantes falsos para disfrazar sus donaciones a los dos fondos".