Los demócratas hicieron este miércoles historia al elegir en las primarias del estado de Vermont a Christine Hallquist como la primera candidata transgénero a una Gobernación en EE.UU.

Hallquist obtuvo un 48,1 % de los votos en unas primarias en las que enfrentó a otros tres demócratas, incluida una joven de 14 años, Ethan Sonneborn, que logró un nada despreciable 8,2 %.

En las elecciones estatales y legislativas del 6 de noviembre, Hallquist se batirá al actual gobernador, Phil Scott, que con un 67,2 % ganó unas primarias republicanas mucho menos concurridas que las demócratas (30.673 a 48.970 con el 87 % escrutado).

Hallquist, de 62 años, salió del anonimato cuando se convirtió en la primera directora ejecutiva de una empresa en hacerse un cambio de sexo, un proceso para el que no abandonó su puesto, mientras trabajaba en una compañía de energía.

"Mi camino para ser mi yo auténtico ciertamente no fue fácil", dijo este año en un acto de campaña. "Sin embargo, siempre ha sido importante para mí vivir abierta y honestamente. Escogí la transición de una manera muy pública porque sentí que se lo debía a aquellos que en la Cooperativa Vermont Electric confiaron en mí", aseguró al lanzar su carrera política.

A lo largo de la campaña, Hallquist ha prometido mejorar la sanidad y la educación de la población y conseguir más empleos para el Estado. La candidata es una de los más de 400 candidatos LGTBI que se presentan a este ciclo electoral, algunos de ellos apoyados por organizaciones sociales. 

Hallquist promete luchar por los derechos de los transexuales que se han visto recortados desde que Donald Trump ascendió al poder. El año pasado, el presidente intentó impedir el acceso al Ejército por parte de los transexuales, algo que los tribunales han tumbado, al menos por lo pronto. Además, Trump también ha frenado la creación de lavabos sin asignación de género en las escuelas.