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Al menos ocho personas han muerto, una de ellas un policía, y 36 más han resultado heridas tras una cadena de explosiones de bombas dirigidas contra puestos policiales de la ciudad colombiana de Cali, capital del departamento de Valle del Cauca (al suroeste del país).

Las últimas informaciones señalan que una bomba instalada en una barrera de señalización vial ha causado la muerte de tres personas en un caserío.

Otras dos de las personas fallecidas han muerto por "la gravedad de las heridas" provocadas por otra explosión horas antes, mientras que el policía ha sido asesinado por un francotirador.

El balance de la Secretaría de Salud señala que entre las personas heridas hay tres menores de edad y 22 hospitalizados.

Esta oleada de atentados terroristas llega días después del intento de magnicidio contra el precandidato presidencial colombiano, Miguel Uribe, que continúa hospitalizado con pronóstico reservado debido a la gravedad de su estado. Recibió dos disparos, uno de ellos en la cabeza.

El policía asesinado es el patrullero Jair Gonzalo Gurrute, de 24 años, según medios locales, que hablan también de otro uniformado herido. Ha ocurrido en Caloto, en el departamento colombiano del Cauca.

El suroccidente colombiano está bajo fuego. La Policía Nacional ha reportado un total de 16 ataques terroristas con artefactos explosivos y coches bomba en la región de Pacífico en menos de 24 horas, de los cuales 10 fueron en municipios de Cauca, informan medios colombianos como La República.

Las bombas explotaron en Corinto y El Bordo, también en el Cauca. Una de ellas de las bombas al parecer estaba colocada en una motocicleta. En las primeras imágenes de los atentados se ve a varias personas tendidas en la calle mientras otros transeúntes y policías tratan de socorrerlos.

Las autoridades informaron, además, de otra explosión en Jamundí, municipio cercano a Cali.

Las autoridades locales atribuyeron esos ataques a disidencias de las FARC al mando de alias 'Iván Mordisco', particularmente al frente Dagoberto Ramos Ortiz y al frente 57, con presencia activa en esa región.

"Nos quieren devolver a 1989. No lo permitiremos. ¡Viva Colombia!", manifestó en su cuenta de X el alcalde de Cali, Alejandro Eder, al recordar el año en el que el terrorismo de los carteles de las drogas causó un baño de sangre en el país.

Tensión en vísperas de visita de Petro

Los ataques se producen un día antes de que el presidente colombiano, Gustavo Petro, visite este miércoles Cali para participar en una movilización popular convocada por sindicatos en apoyo a la consulta popular que el mandatario quiere convocar por decreto para aprobar su reforma laboral ante los reveses sufridos en el Senado.

La anunciada visita del mandatario tendrá lugar en un momento de crispación política por su insistencia en convocar una consulta popular, que la oposición tacha de "ilegal" y tras el atentado contra Uribe, del partido uribista Centro Democrático.

"Señor presidente Gustavo Petro, aprovechando su presencia el día de mañana en la ciudad de Cali, le solicito que convoque un Consejo de Seguridad para todo el suroccidente del país ante la escalada terrorista que hoy estamos viviendo y generar las acciones integrales que se deben realizar para lograr la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos", agregó la gobernadora de ese departamento, Dilian Francisca Toro.