El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, ha anunciado este jueves que los secuestradores de los periodistas ecuatorianos tienen un plazo de 12 horas para confirmar su estado o hará uso de "toda la fuerza", según ha recogido el diario local 'El Comercio'. 

El pasado 26 de marzo, el periodista Javier Ortega, de 36 año, el fotógrafo Paúl Rivas, de 45, y el conductor Efraín Segarra, de 60, fueron secuestrados en la zona de Mataje, en la provincia de Esmeraldas (noroeste), donde recababan información sobre los ataques registrados en esa región desde enero. En caso de que no se comunique la situación en la que se encuentran, ha dicho el presidente, las fuerzas de seguridad "irán con toda la contundencia, sin contemplaciones, contra estos violadores de los Derechos Humanos".

Moreno da doce horas para prueba de vida, si no, intervendrá con contundencia

El ultimátum se produce mientras circulan unas fotografías que muestran los supuestos cadáveres de los tres integrantes del equipo periodístico, que, según el Gobierno ecuatoriano, "no son concluyentes". Las autoridades están analizando las fotografías para averiguar si se trata de los cadáveres de los periodistas y si pueden haber sido asesinados por disidentes de las FARC.

Tras expresar su pesar a la familia de los periodistas, el dirigente ecuatoriano ha instado a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, a poner en marcha medidas contundentes. "Ya basta de contemplaciones, no debemos dejar que nos impongan sus reglas", ha aseverado Moreno.

El mandatario colombiano, por su parte, ha asegurado a través de Twitter que ha hablado "con el presidente de Ecuador, a quien ha reiterado que tiene y tendrá todo el apoyo del presidente, de las Fuerzas Armadas y del pueblo colombiano".

Desde el momento en que se produjo su desaparición, los gobiernos de Colombia y Ecuador mantuvieron reuniones de trabajo para en un intento por lograr la puesta en libertad del equipo de 'El Comercio'. Este mismo jueves, el ministro del Interior de Ecuador, César Navas, ha asegurado que aún no hay confirmación sobre la muerte de los periodistas. "No hay confirmación al momento, así que se va a continuar con las pericias", ha aseverado Navas durante una rueda de prensa.

"Hemos tenido acercamiento con las autoridades colombianas que también han realizado un análisis y pericias a las fotografías y tampoco son concluyentes", afirmó Navas.

El Director de la Unidad de Criminalística de la Policía ecuatoriana, Fausto Olivos, dijo en esa misma comparecencia que, pese a existir coincidencias en las imágenes revisadas, se debe continuar con las investigaciones.

"Podemos decir que, por medios precientíficos del análisis de las prendas, estas son coincidentes con dos de las personas secuestradas" y que tras un "estudio biométrico del rostro, esta nos da una alta probabilidad que sea coincidente con otro de ellos", precisó Olivos.

Respecto a la escena que se muestra en las imágenes, el experto dijo que existen "probabilidades de la ocurrencia del hecho", pero que sólo podría confirmarse con el hallazgo de la misma escena del crimen, por lo que la investigación continuará.

Decenas de personas se concentraron en la Plaza Grande de Quito y siguieron con atención la alocución de Moreno, pero tras el pronunciamiento estallaron en gritos de protesta en demanda de una información transparente y por la necesidad de que los secuestrados regresen con vida.

Moreno subrayó que esta "no es una lucha de Ecuador, es una lucha de todos" por lo que agradeció las muestras de apoyo que dijo haber recibido de otros colegas del mundo.

Insistió en que el plazo dado a los secuestradores para que entreguen la prueba de vida ha empezado a correr "desde este momento", algo de lo que están al tanto los familiares de los secuestrados, algunos de los cuales regresaron con él en el avión desde Lima, a donde se desplazaron para tratar de reunirse con el presidente colombiano.