P. Campos | Agencias
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Las claves

Cuatro minutos fueron suficientes. En apenas 240 segundos una banda de ladrones organizada ha perpetrado uno de los mayores robos de la historia reciente de Francia.

Un grupo de "tres o cuatro" hombres ha robado nueve joyas en el Museo del Louvre de un "valor patrimonial e histórico inestimable", según Laurent Núnez, ministro de Interior de Francia.

En torno a las 9.45 horas, los hombres llegaron en dos motos a las instalaciones del Louvre, en concreto, a un tramo en obras situado en el lado del río Sena.

Allí usaron una plataforma elevadora para subir hasta la primera planta del museo, y, posteriormente, romper las ventanas con motosierras para acceder al interior

Fue ahí cuando los ladrones entraron a la galería Apolo del Museo del Louvre y se llevaron varias joyas de gran valor. 

Una de las piezas robadas fue encontrada en las inmediaciones del museo. Se trata de la corona de la emperatriz Eugenia, esposa de Napoleón III, según ha adelantado Le Parisien.

Los ladrones dejaron caer esta pieza durante su huida del Museo del Louvre, tal y como han señalado las autoridades galas. 

Después de hacerse con el botín, los hombres regresaron al punto inicial y huyeron del lugar en sus motocicletas, que habían aparcado en la zona de las obras, según EFE.

Tras el robo las autoridades galas cerraron el Museo del Louvre y sus puertas no se abrirán hasta, por lo menos, el lunes. 

Joyas amenazadas

Núnez no quiso precisar cuáles son las joyas sustraídas, más allá de que estaban en la galería Apolo, pero Le Parisien indicó que fueron nueve piezas que pertenecen a la colección de joyas de Napoleón y a la colección de los reyes franceses, incluidos un collar, una diadema y un broche.

Algunas de las piezas que forman parte de la colección de la galería Apolo del Museo del Louvre son tres diamantes históricos: el 'Regente' (140 quilates), el 'Sancy' (55 quilates) y el 'Hortensia' (20 quilates). Estas joyas decoraron en su día la ropa de los monarcas franceses. 

Diamante 'Regente'. Museo del Louvre.

Otra de las claves de esta colección son las coronas que un día llevaron los monarcas franceses. La de Luis XV se guarda en esta galería y está recubierta de piedras preciosas, así como la de la emperatriz Eugenia.

La diadema de la duquesa Angulema es otra de las piezas más valiosas, junto con las joyas de la emperatriz María Luisa y la espinela "Costa de Bretaña".

Banda organizada

Las autoridades francesas han anunciado que se ha abierto una investigación por robo organizado y asociación delictiva para delinquir. Por ahora las investigaciones continúan y no hay información sobre el paradero o la identidad de los ladrones. 

Rachida Dati ha detallado que los ladrones no actuaron con violencia y que el robo terminó sin ningún herido, una de las preocupaciones de las autoridades galas a raíz de la gran afluencia que tiene el Museo del Louvre, visitado por más de 8 millones de turistas al año. 

Por su parte, Núnez ha detallado que tiene "una gran confianza en que muy rápidamente encontremos a los autores" y, con ellos, a todos "los bienes robados".

A pesar de esto, el ministro reconoció que "hay una fragilidad" en la seguridad de los museos franceses y por eso se lanzó un programa para mejorar la situación, y eso también afecta al Louvre. Algo en lo que también coincide Dati, al señalar que la vulnerabilidad de los museos franceses es un problema "antiguo".