Agencias

Un inmenso incendio ha arrasado un campo de refugiados de Cox's Bazar, al sureste de Bangladés. El fuego ha quemado unas 2.000 viviendas y ha causado 12.000 desplazados, según ha informado el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). De momento, las autoridades no han reportado víctimas mortales y las organizaciones humanitarias han pedido ayuda para enviar comida y encontrar un nuevo techo.

Cox's Bazar es uno de los campos de refugiados más grandes del mundo, con cerca de un millón de residentes. La mayoría pertenece a la etnia rohinyá, que ha huido del vecino Myanmar (la antigua Birmania) por el acoso de la Junta Militar, que ha sido internacionalmente calificado de limpieza étnica. A lo largo de los últimos años, pero sobre todo desde 2017, han ido escapando miles de personas pertenecientes a esta comunidad. 

El incendio se ha producido a mediodía de este domingo en el campamento numerado como 11, en Balukhali. Emdadul Haque, oficial del servicio de bomberos de Bangladés, ha declarado al periódico digital DW que no había víctimas mortales y que estaban a la espera de contabilizar daños materiales o si había algún herido.

Según algunas de las organizaciones humanitarias que trabajan en la zona, los propios residentes ya estaban luchando por mitigar el fuego. Y según el periódico local Dhaka Tribune, también se habían desplegado cuatro unidades de servicios de bomberos, que desconocían cómo se había originado el incendio.

"Actualmente no tenemos una estimación de los daños, pero no hay informes de víctimas", manifestaba a Reuters el máximo responsable de policía de Cox's Bazar, Rafiqul Islam. El agente ha añadido que el incendio había sido controlado y que ya había personal de bomberos, policía y asociaciones de ayuda a los refugiados en el lugar.

12.000 desplazados por un incendio en Cox's Bazar. REUTERS

Unos 2.000 refugios han sido quemados, dejando sin hogar a unos 12.000 ciudadanos de Myanmar desplazados por la fuerza, explicaba Mijanur Rahman, comisionado de refugiados de Bangladés, a la agencia AFP. Rahman apuntaba que 35 mezquitas y 21 centros de aprendizaje se encuentran entre los edificios destruidos.

Mohammad Shamsuddoza, otro alto funcionario de la Comisión de Ayuda y Repatriación de Refugiados de Bangladés, detalló a la agencia de noticias alemana DPA que las viviendas estaban levantadas principalmente de bambú y lona.

El suceso ha recordado a otros similares en enero de 2022 y marzo de 2021. Este último mató a 15 personas y destruyó más de 10.000 hogares. La feroz represión iniciada en 2017, tachada de genocidio, ha provocado que los rohinyás abandonaran en oleadas su país de residencia, Myanmar. Allí se les ha negado la ciudadanía y otros derechos. Los intentos de Bangladés de enviarlos de regreso en los últimos meses han fracasado.

Aún se desconocen las causas del incendio en Cox's Bazar, al sureste de Bangladés. REUTERS