La República Democrática del Congo (RDC), situada en el centro del continente africano, sufre su segundo brote de ébola este año. El primero proliferó de manera rápida este verano, pero pudo ser contenido con eficacia. A finales de junio, la Organización Mundial de la Salud declaró la epidemia "controlada".

Ahora, un segundo brote ha puesto en jaque las elecciones presidenciales. Pero muchos creen que este aplazamiento tiene que ver con las sospechas de pucherazo en unas elecciones, que llegan con dos años tarde. El mandato del actual presidente, Josep Kabila, se acabó en 2016.

Kabila ha intentado aferrarse a la presidencia con insistencia: no solo ha alargado su mandato dos años a pesar de las constantes protestas de los congoleños, sino que ha intentado modificar la Constitución del país para eliminar la ley que limita los mandatos presidenciales.

Un neumático arde durante las protestas civiles por el aplazamiento de las elecciones.

El pasado 23 de diciembre era la fecha elegida para llamar a las urnas, pero no finalmente no ha sido así. Estas elecciones, a las que Kabila no se presenta, "deben ser buenas", dice Floribert Anzuluni, coordinador de la plataforma Filimbi.

"El pretexto del ébola es una falacia"

Filimbi es un "movimiento pro-democracia y derechos civiles", desde la que denuncian que "el proceso está manipulado por el régimen de Kabila".

Desde la plataforma afirman que este "controla la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI) y ha manipulado el censo electoral", y temen que las elecciones se estén manipulando a favor del partido de Kabila.

La CENI ha dicho que los votos de zonas como Butembo, Beni y la ciudad occidental de Yumbi -bastiones de la oposición contra Kabila- se emitirán en marzo, dos meses después de cuando está previsto que se anuncien los resultados finales, sin explicar además cómo estos 1.25 millones de votos se reflejarán en los resultados.

Además, estas ciudades son el epicentro de este segundo brote de ébola en 2018, por lo que se ha culpado al virus -que ha causado 354 muertes desde agosto- del retraso. "El pretexto del ébola es una falacia porque ha habido campañas en estas áreas", dice Martin Fayulu, principal candidato de la oposición.

Una manifiestación a favor del candidato Martin Fayulu.

Fayulu ha calificado el retraso como "otra estrategia más para secuestrar la verdad de las encuestas" de Kabila, quien lleva en el poder desde 2001.

"Tenemos miedo de que nos maten"

Ocho países se reunieron este miércoles para debatir la situación de la RDC, que sufre conflictos armados a causa de la gran presencia de minerales como el cobre o el cobalto -imprescindible en la industria tecnológica-.

Entre 1996-1997 y 1998-2003, las guerras dejaron millones de muertos. Ahora, se calcula que el país tiene no menos de 100 grupos armados.

Los congoleños temen más a las milicias armadas que al virus: "Tenemos miedo de los Mai-Mai (término local para llamar a las milicias). Tenemos miedo de que nos maten", dice la vacunóloga Kasereka Bernardin, un testimonio recogido por The New York Times.

El Dr. Shako atiende a milicianos enfermos de ébola. Cuando les trata, elige las palabras con minuciosa cautela y se pone ropa sucia: "Se enfadan si alguien va más limpio que ellos", dice.

Asegura que, aunque es difícil, los milicianos al final comprenden que los médicos solo quieren ayudarles. "Esta es la misión de mi vida".