El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, que gobierna Turquía desde el año 2002 al frente del islamista AKP, ha anunciado como prioridades en su nueva etapa reformas estructurales en la economía para frenar la inflación y el amplio déficit por cuenta corriente del país.

Por otro lado, su Gobierno ha expulsado este domingo a más de 18.000 funcionarios, en su mayoría militares y policías"Estamos acelerando el funcionamiento del Estado y haciéndolo más eficiente fusionando instituciones que realizan trabajos similares y disolviendo las que están inactivas", ha declarado Erdogan, quien también ha afirmado que este lunes emitirá el primer decreto presidencial, una nueva atribución otorgada al jefe del Estado.



El presidente, de 64 años, ha justificado la necesidad de este modelo hiperpresidencial para que las grandes reformas en el país no dependan de frágiles aritméticas parlamentarias. 

Más poderes para el presidente



Los cambios constitucionales del sistema presidencialista, aprobados en un referéndum el año pasado, eliminan la figura del primer ministro para ceder más poderes al presidente. A partir de ahora el jefe de Estado podrá elegir a los miembros del gobierno y otros funcionarios públicos sin la aprobación del Parlamento.



Asimismo, el presidente puede nombrar directamente a cuatro y de forma indirecta a dos de los trece miembros del Consejo Supremo del Poder Judicial, frente a siete nombrados por el Parlamento.



El Parlamento pasará de 550 a 600 escaños y, aunque pierde poder, prevalece sobre los decretos presidenciales que pretendan legislar sobre los mismos asuntos que el hemiciclo.

Críticas al sistema



Los contrarios a este modelo coinciden en que diluye la separación de poderes y cimenta un modelo autoritario. Seyit Torun, vicepresidente de la mayor formación opositora, el Partido Republicano del Pueblo (CHP), explica que el país se aleja con este modelo de las democracias occidentales y del legado laico de Atatürk, fundador de la República en 1923.



"Con los cambios constitucionales que reemplazaron la democracia parlamentaria por el sistema presidencial ejecutivo, Turquía también se aleja de las democracias occidentales y se acerca hacia el modelo de gobierno de los países de Oriente Medio", lamentó Torun. "Entramos en un período más nacionalista, religioso y despótico en el que Erdogan asume el control del poder judicial, el legislativo y el ejecutivo", agregó.

En la misma línea se manifestó en declaraciones el portavoz del izquierdista y prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), Ayhan Bilgen. "Turquía está entrando en un nuevo modelo de gobierno basado en un solo hombre y en un partido-estado, mientras que la solución de sus problemas fundamentales, entre ellos la cuestión kurda, solo puede llegar con una mayor democratización", expone el diputado del HDP.

Bilgen considera importante aglutinar a la oposición social a Erdogan para "fortalecer las esperanzas de cambio" en el futuro.

Toma de posesión 'clandestina'

Erdogan asume este lunes su cargo en una ceremonia en Ankara en la que destaca la ausencia de líderes occidentales, después de sus últimos encontronazos con la Unión Europea y EEUU.



Al menos 17 jefes de Estado o de Gobierno han anunciado su asistencia, entre ellos el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, así como los líderes de Bosnia-Herzegovina, Bulgaria, Georgia, Macedonia, Pakistán o Somalia.