Tánger

Marruecos, tradicionalmente francófono, se ha decidido por el inglés como segunda lengua y deja al español en la Segunda B de los idiomas. El número de matriculados en lengua española cada año sufre un mayor descenso. Los post en redes sociales del Instituto Cervantes de Rabat aparecen escritos en francés. Incluso los de la Diócesis de Migraciones de Tánger, para los anuncios de cualquier actividad española, usan la lengua de Molière. Las mismas instituciones han hincado la rodilla ante la decadencia del español en Marruecos.

Un grupo de hispanistas y profesores universitarios ha dado la voz de alarma a través de un informe en el que propone una serie de medidas para resucitar la lengua española en el norte de África. Las paradojas se reproducen, ya que Marruecos junto a Brasil es uno de los países con mayor presencia del Instituto Cervantes.

Este informe señala que el comienzo del siglo XXI ha supuesto una situación de grave deterioro del español y de lo hispano frente al francés y al inglés, que amenaza la importancia de la histórica presencia cultural española en Marruecos. Las instituciones dedicadas al fomento del inglés y el francés, con la connivencia marroquí, han ganado la partida a las españolas. Según los firmantes del documento, se debe a “la insuficiente intervención de las autoridades españolas, en materia cultural, en este país que, en estos últimos años, ha llegado a ser prácticamente inexistente”.

La merma en el número de matriculaciones es catastrófica en los centros universitarios marroquíes

En resumen, en palabras de los hispanistas marroquíes: “Asistimos al mayor retroceso de la lengua y la cultura española en Marruecos y del hispanismo en general, sin que se tome conciencia clara de esta situación por parte de las autoridades españolas”.

Los autores de este documento son: José Sarria, miembro de la junta directiva Club de Amigos de Marruecos en España y secretario General de la Asociación Colegial de Escritores-Andalucía; Abderrahman El Fathi, jefe del departamento de Lengua y Literatura Españolas de la Facultad de Letras de la Universidad Abdelmalek Essâadi y dos miembros de su equipo, Nisrin Ibn Larbi y Rachida Gharrafi; Aziz Tazi, director del Departamento de Hispánicas de la Facultad de Letras de Dhar el Mehraz-Fez; y Abdellatif Limami, catedrático de Lengua y Literatura Hispánicas en la Universidad Mohamed V de Rabat.

Las autoridades no reaccionan

El grupo de especialistas viene desde hace tiempo alertando sobre esta situación, “sin que ninguna institución española haya reaccionado”, al ver cómo las aulas de español se cerraban en los institutos marroquíes y advirtiendo de que los puestos de profesores estaban desapareciendo, lo que puede significar la total aniquilación de lo español en la zona, y no sólo de la lengua.

Las cifras cantan y arrojan un balance dramático para el español en el reino alauita: el número de matrículas en el departamento de hispánicas de Tetuán ha experimentado un retroceso drástico. En el presente año se han inscrito 42 nuevos estudiantes, cifra récord a lo largo de los 30 años que lleva el departamento abierto a los alumnos que desean seguir su carrera en hispánicas.

Piden un plan de choque conjunto con las autoridades culturales españolas

La Universidad Abdelmalek Essadi, que siempre ha encabezado a los seis departamentos de hispánicas que existen en Marruecos, aportaba un número nunca inferior de 300 alumnos al año. La merma de alumnos también afecta a la Universidad Sidi Mohamed Ben Abdellah, de Fez, que ha pasado de 1.229 estudiantes de hispánicas, en el curso 2008-2009, a 391 en el curso 2016-2017.

En cuanto a las nuevas matriculaciones, en el presente curso existen 75 nuevos alumnos, cuando lo habitual era un nivel de nuevas matriculaciones en torno a 300 estudiantes. En Agadir, en la Universidad Ibn Zohor, en el presente curso se matricularon 12 alumnos. Y así hasta llegar a la Universidad de Mohamed V, en Rabat, que ha suspendido en el presente curso académico la opción de Literatura Española por falta de estudiantes. “La situación habla por sí misma y nunca había alcanzado cifras tan alarmantes”, comentan los autores del informe.

Abderrahman El Fathi J. L. Tapia

La culpa la tiene la crisis económica

El documento analiza la situación actual y cómo se ha llegado a ella. La pérdida de presencia del español coincide con la crisis económica. “Antes de la crisis en España, y ante la falta o escasez de salidas profesionales en su propio país de los diplomados, el país vecino constituia un horizonte potencial anhelado y una esperanza de futuro. La crisis económica en España vino a ser como una especie de ‘efecto repulsa’ para los aspirantes a hispanistas marroquíes”, señala el informe.

Más allá de la situación económica actual, los profesores alauitas que han contribuido a elaborar el documento indican como causas, entre otras, que han agravado esta situación: la propaganda del Gobierno marroquí a través de sus 13 academias para que los estudiantes elijan el inglés como lengua secundaria en los centros educativos, “sin que exista una acción similar o de contrapeso por parte de las autoridades culturales españolas”; la supresión de plazas para licenciados en Hispánicas; la existencia, “a nivel político, de un extraño desinterés por la presencia del idioma español y que necesita de una acción diplomática por parte de las autoridades españolas”; y la desaparición de los incentivos que existían por parte de las consejerías de Educación y Cultura de la Embajada española. A estas causas suman “la marginalidad a la que ha sido reducido el Instituto Cervantes”, que “se ha transformado en una mera academia para aprender español” y “al deterioro del nivel de formación de los estudiantes”.

Ante tal situación los firmantes del informe proponen una serie de medidas para lograr la ‘reanimación’ de la lengua española en Marruecos. Proponen la celebración de un encuentro de los directores responsables de los departamentos de Español en Marruecos para abordar el problema; establecer una comisión de trabajo por parte de un grupo de hispanistas marroquíes con los responsables de los ministerios de Exteriores y de Cultura españoles, para crear un Observatorio permanente de análisis y seguimiento del hispanismo, y así “concretar la elaboración de un programa de actuaciones que contribuyan a la revitalización del español y de lo hispano en Marruecos”.

La solución pasa, según los hispanistas, por la “voluntad política” de ambas partes, marroquí y española, para alentar los estudios hispánicos. “Esa voluntad se debe plasmar en acciones de carácter diplomático”, añaden. También aconsejan “mantener y potenciar las asesorías pertenecientes a las Consejerías de Educación y de Cultura españolas en Marruecos” y dotarlas de más medios.

Estudiantes en el Cervantes de Tánger J. L. Tapia

El documento dedica un apartado especial a los institutos Cervantes. Consideran que “deben implicarse con los departamentos de Hispánicas de las universidades marroquíes: mayor coordinación y cooperación, colaborar, eliminando competencia en que son de de interés común”.

Los firmantes del informe manifiestan que “en los institutos Cervantes debe existir una presencia activa de los profesores y responsables universitarios de Hispánicas”. Los especialistas se quejan de que “el acceso a las bibliotecas y fondos editoriales de los institutos Cervantes y de la Embajada debe de contar con una disposición más franca hacia profesores y estudiantes universitarios”. Además, piden la “colaboración de los jefes de departamento de Hispánicas en la selección de los directores de institutos Cervantes de Marruecos”.

Los expertos invitan a la creación de una Asociación de Hispanistas y Escritores marroquíes en lengua española, desde las Consejerías de Educación y Cultura de España y Marruecos, y de soportes para el hispanismo, como una página web, revista y ediciones. Los profesores también piden una mayor atención y consideración desde las instituciones consulares y diplomáticas “a la hora de obtener sus visados para viajar a España”, y añaden que “los profesores de francés e inglés reciben privilegios consulares en sus desplazamientos”.

A los hispanistas marroquíes, lanzado el SOS, solo les queda esperar la respuesta institucional. Más allá de los ámbitos académicos, un gran número de marroquíes, aunque solo sea por el fútbol, siguen el Mundial de Rusia a través de medios españoles. No es extraño ver durante los partidos del Real Madrid o del F. C. Barcelona a los tangerinos pegados a la radio en español. O bien aquellos que afirman saber algo de la lengua de Cervantes gracias a los canales de televisión españoles. Estos testimonios hacen creer que todavía, a nivel usuario, hay esperanza.