Existen múltiples ejercicios y entrenamientos más completos que se van renovando cada temporada con el fin de reinventarse y potenciar al máximo los objetivos de cada uno de ellos, pero no todas consiguen consolidarse como auténticas "revoluciones".
Tras el boom del hot yoga, ahora llega el hot pilates, una disciplina que promete eliminar grasa, tonificar el cuerpo y fortalecer el core de una forma rápida y efectiva.
Cada vez más mujeres de más de 40 años lo incorporan a sus rutinas porque es una actividad de bajo impacto, adaptable a todos los niveles y con un plus muy especial: se practica en una sala climatizada a unos 35 grados.
El hot pilates combina los ejercicios tradicionales de pilates con la práctica en un entorno de calor controlado. Durante una sesión de entre 45 y 60 minutos, los participantes trabajan sobre una colchoneta con movimientos lentos, controlados y muy efectivos para activar la musculatura profunda.
El calor aumenta la circulación sanguínea, mejora la flexibilidad y ayuda a quemar más calorías en menos tiempo. Además, facilita que los músculos se relajen y se estiren con mayor seguridad, reduciendo el riesgo de lesiones.
Beneficios del 'hot pilates'
A diferencia de otras disciplinas de moda, el hot pilates no requiere experiencia previa. Se adapta tanto a principiantes como a mujeres experimentadas, y siempre es posible modificar la intensidad de los ejercicios según la condición física.
Las mujeres a partir de los 40 años buscan entrenamientos que ofrezcan resultados visibles sin poner en riesgo las articulaciones.
El hot pilates cumple con ambos objetivos y, según los expertos, aporta ventajas muy concretas:
- Quema de grasa más rápida gracias al calor, que aumenta el gasto energético.
- Fortalecimiento del core (abdominales, espalda baja y caderas), clave para la postura y la prevención de lesiones.
- Mayor flexibilidad y movilidad articular, especialmente útil en mujeres que empiezan a notar rigidez con la edad.
- Reducción del estrés gracias al enfoque en la respiración y la conexión mente-cuerpo.
- Mejora de la circulación sanguínea, lo que contribuye a una piel más luminosa y a un mejor drenaje de líquidos.
En palabras de la entrenadora y fisioterapeuta Marta Romero: "El hot pilates es perfecto para mujeres a partir de los 40 porque combina tonificación, quema de calorías y cuidado de las articulaciones. Es un entrenamiento completo, seguro y muy efectivo".
Clases de 'hot pilates'
Al entrar en la sala, climatizada entre 32 y 37 grados, la sensación puede resultar intensa, pero en pocos minutos el cuerpo se adapta. La clase suele estructurarse en bloques:
- Calentamiento suave con ejercicios de respiración y movilidad.
- Bloque de core con planchas, abdominales hipopresivos y movimientos de estabilización.
- Trabajo de piernas y glúteos con elevaciones, zancadas y estiramientos dinámicos.
- Ejercicios de brazos y espalda para tonificar sin necesidad de pesas.
- Relajación final con estiramientos profundos y técnicas de mindfulness.
La combinación del calor con estos movimientos hace que desde la primera sesión se sienta una activación muscular intensa y una sudoración abundante, lo que refuerza la sensación de limpieza y detox físico.
'Hot pilates' vs. pilates tradicional
Aunque ambos comparten la misma base, existen diferencias importantes:
- Mayor gasto calórico: la versión "hot" puede duplicar la quema de calorías de una clase tradicional.
- Más flexibilidad: el calor favorece que los músculos se estiren más y mejor.
- Efecto detox: la sudoración elimina toxinas y líquidos retenidos.
- Ritmo más exigente: aunque es de bajo impacto, la intensidad del calor lo convierte en un reto físico y mental.
Por todo ello, muchas mujeres que ya practicaban pilates se están pasando al formato hot para dar un salto en sus resultados.
Aunque nació en Estados Unidos, el hot pilates ya cuenta con estudios especializados en algunas ciudades españolas y tiene toda la pinta de que se va a convertir en pura tendencia, especialmente entre mujeres de más de 40 años que buscan un entrenamiento completo, seguro y transformador.
