Este 8 de abril termina la estancia de la heredera en Valparaíso, en la que ha sido su segunda escala chilena (primero estuvo en Punta Arenas). Han sido cuatro días bastante relajados durante los que hemos podido verla en varias ocasiones. Y todas ellas con su uniforme '14 botones'. Su llegada, el viernes 4, fue la habitual, con todos los guardiamarinas en la cubierta de Elcano saludando. Durante el fin de semana hubo una salida privada para cenar con sus compañeros y el lunes una visita a la escuela naval Arturo Prat de Valparaíso.
Leonor y el resto de la tripulación del crucero de instrucción de la Armada participaron en un acto muy especial. El capitán de navío Luis Carreras-Presas do Campo hizo entrega a la Armada de Chile de un busto del marino español Blas de Lezo, que se sumó así a la galería de navegantes ilustres del centro.
Antes del evento protocolario, en el que se entonaron los himnos nacionales de ambos países, todos realizaron un recorrido por diversas estancias. Allí pudieron observar maquetas de diversas embarcaciones históricas y otros objetos destacados de la Armada chilena y se realizó la pertinente firma en el libro de honor.
La Princesa y sus compañeros, en la escuela naval Arturo Prat.
La Princesa participó como una más, debidamente uniformada y prestando atención a todas las explicaciones. Posteriormente, ya por la noche, hubo una recepción con la colonia española en la ciudad vecina de Viña del Mar, aunque no han trascendido imágenes hasta el momento. Cumplidas estas citas, el Juan Sebastián de Elcano pone rumbo a su próxima parada: El Callao en Perú, donde está previsto que llegue el próximo 18 de abril.
Pero también ha habido tiempo para conocer la zona y disfrutar de la gastronomía local. Leonor y varios compañeros salieron a cenar el sábado 5 a un restaurante de Viña del Mar. Nuevamente con el '14 botones', disfrutó de los manjares chilenos que se sirven en Don Emelio y no dudaron en posar con los dueños, que subieron las fotos a su perfil de Instagram.