La reciente celebración de la Mediterránea Fashion Week en Valencia ha sido un evento marcado por la solidaridad, la creatividad y el apoyo a las marcas locales que, tras la devastadora DANA del pasado mes de octubre, vislumbraron un futuro realmente incierto. Ante esta situación, la figura de la reina Letizia ha brillado con fuerza, convirtiéndose en un pilar fundamental para muchas empresas, entre ellas Boira Glass, una firma de joyas artesanas y de cristal que ha experimentado un auténtico resurgir gracias al apoyo público de Su Majestad.
Mediterránea Fashion Week, que reunió en la capital del Túria a más de 5.000 personas, no solo sirvió para presentar colecciones, sino también para recaudar fondos a favor de los diseñadores afectados por la catástrofe. Entre los participantes se encontraban algunas de las marcas más representativas de la región.
Firmas como INNIKI, Mario Salafranca, Duly Romero y Maison Mesa, entre otras, dirigidas por Sergio Puig, creador de la pasarela, trasladaron su creatividad a la capital de la Comunidad Valenciana para, además de mostrar sus propuestas, contribuir a la solidaridad del momento. Entre ellas, destacan las marcas locales que se dieron cita en el showroom solidario del Palacio de la Exposición.
La reina Letizia, con pendientes de Boira Glass.
Boira Glass, fundada por Covadonga Ferrer, se vio afectada por los daños materiales derivados de la DANA, pero también por el impacto emocional que supuso ver su entorno, su comunidad y sus clientes atravesar tiempos difíciles. Sin embargo, el apoyo recibido desde diversos frentes, especialmente por parte de la reina Letizia, ha sido crucial para la firma.
La propia Covadonga Ferrer, en conversación con Magas, confesó cómo el respaldo de Letizia ha sido un antes y un después para su marca: "Gracias a la Reina, mi marca está siendo un boom, y tiene más joyas mías aún por estrenar", señaló con entusiasmo.
La Reina, conocida por su elegancia y por apoyar a las creaciones de diseñadores españoles, eligió varias piezas de Boira Glass para su joyero personal, luciéndolas en eventos públicos, lo que desató una ola de atención en las redes sociales y en los medios de comunicación.
El apoyo de la reina Letizia no solo ha sido un acto simbólico, sino que ha tenido un impacto directo en la trayectoria de la firma valenciana. Covadonga Ferrer relata cómo, de la noche a la mañana, la firma experimentó un incremento notable de seguidores en redes sociales, junto con un aumento en las consultas y ventas.
"El boom fue muy notorio en redes sociales y he de admitir que me agobié bastante. Sufrí lo que se conoce como síndrome del impostor. De repente, hubo un crecimiento enorme de seguidores, mensajes, personas interesadas en mis joyas… pensé que no me lo merecía", comenta Ferrer a esta revista.
A pesar de la incertidumbre que aún rodea a las marcas valencianas, Boira Glass se ha centrado en aprovechar este crecimiento para fortalecer su presencia. "En estos momentos me he centrado en actualizar la web, reponiendo mis modelos de siempre. Tengo ganas de, poco a poco, volver a la normalidad y poder realizar nuevos diseños y proyectos", explicó la CEO de la firma, anticipando nuevos lanzamientos, entre ellos, su incursión en el mundo de la decoración.