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Fiel a su compromiso con la tragedia que asolaba la comunidad valenciana el pasado mes de octubre, la madre de Felipe VI se ha desplazado hasta la ciudad del Turia para cumplir con un importante compromiso de agenda oficial. Este lunes 3 de febrero, la reina Sofía ha presidido el concierto solidario a favor de las personas afectadas por la DANA, organizado por el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat que se ha celebrado en el Palau de la Música. Ha estado dirigido por el venezolano Gustavo Dudame e interpretado por la Orquesta de Valencia y la Orquesta de la Comunidad Valenciana.

Llegaba hasta allí sin apenas tener tiempo de descansar, ya que el sábado 1 estuvo en Sevilla en el funeral de Fernando de Borbón y Medina, primo de Felipe VI. La acompañaba el Rey y las infantas Cristina y Elena. De luto riguroso, la Emérita apoyaba a la familia asistiendo al servicio religioso en la parroquia de Santa María Magdalena. Y un día, antes, el viernes 31 había viajado a Segovia para la entrega del Premio Unión Europea de Patrimonio Cultural. 

Muchos kilómetros en poco tiempo que, pese a todo, no hacen mella en su actividad, aunque durante el citado acto, en el Real Sitio de San Ildefonso, tuvo que ser ayudada por varias personas a bajar las escaleras; unas imágenes que sorprendieron bastante. Con este nuevo desplazamiento a Valencia, la reina Sofía muestra que se encuentra bien y que no baja el ritmo en su tarea de representar a la Corona. 

La Emérita, con un kimono bordado, ha sido recibida por diversas personalidades. Gtres

Para su cita con los afectados por la riada, la Emérita ha elegido uno de esos kimonos bordados que tanto le gustan, dando otra lección de estilo (una más). También llevaba un largo chal en la misma gama de color. A su llegada al Palau de la Música de Valencia ha sido recibida con mucho cariño por las personas que se encontraban en los alrededores y, antes de entrar en el recinto, ha saludado a las distintas personalidades.

La Emérita es una gran melómana y si, además, el concierto es benéfico aún mejor, porque gran parte de su agenda se centra en este tipo de causas. Desde el principio ha estado muy volcada con Valencia, haciendo generosas donaciones a través de la Fundación Reina Sofía. La pasada semana se desplazó también hasta las nuevas instalaciones del Banco de Alimentos en la Pobla de Vallbona para interesarse por la situación actual en los pueblos afectados.

La reina Sofía, aplaudida por el auditorio. Efe

Se ha desplazado hasta Valencia sola, sin la presencia de su hermana, la princesa Irene de Grecia, también una gran apasionada de la música, aunque sus problemas de movilidad hacen que no la acompañe siempre en sus actos oficiales. En principio, este será el último acto de la reina Sofía esta semana.