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Lo que debía ser una decisión libre de una mujer que había optado por no seguir adelante con su relación y con el embarazo, se convirtió en un plan meticulosamente elaborado y casi de película por parte del exnovio de Belén. Así lo contaba ella durante su paso por el programa de Antena 3 de 'Y ahora Sonsoles', donde relató como durante nada menos que 10 meses y mientras seguían juntos, su expareja llevó a cabo una enrevesada estrategia de manipulación llegando incluso a contratar a una decena de actores para influir en su decisión y convencerla de no abortar.

Belén recordaba en el programa que, cuando conoció a su expareja su vida era "un poco caótica y de mucho desorden". Él trabajaba en el entorno musical, tenía un estudio en casa y se movía también en el ámbito audiovisual. Asegura que la conexión de primeras fue inmediata: "Encajamos a la perfección", relata.

Pero aunque en esas primeras semanas todo parecía encajar, pronto empezó a ver comportamientos que "no me cuadraban mucho". Aún así, como ella misma reconoce, las señales de alarma se mezclaban con muchas otras que parecían positivas, lo que la llevó a continuar con la relación.

Apenas un mes después se quedó embarazada. Para entonces, esas actitudes que no acababa de comprender ya eran difíciles de ignorar. Así que tomó la decisión de no seguir adelante con el embarazo. Sin embargo, su novio al ver que el aborto podía acabar con su relación, decidió contratar decenas de actores.

Estos seguían un guion y tenían un vestuario con el que se hacían pasar por monjas y sacerdotes, entre otros. Todos ellos con discursos religiosos con los que trataban de convencerla de que siguiese adelante con el embarazo.

Llegó a acudir a una clínica para interrumpirlo, pero allí le dijeron que no podía realizar la intervención porque "no había nada dentro". Belén sabía que aquello no tenía sentido ya que, como ella misma cuenta, ya había pasado por un embarazo anterior y "sabía perfectamente cómo se siente".

En estado de shock decidió esperar un poco más antes de volver. Sin embargo, dos semanas más tarde, en una tienda de ropa asegura que se le acercó una mujer desconocida y llorando a mares: "Se me acercó llorando y diciendo que el niño que llevaba tenía un destino", asegura. "Se me aparecían en tiendas de ropa, al girar la calle... me lo creía porque eran sitios donde nadie podía saber que estaba", recuerda.

Un patrón que se repitió tantas veces que Belén terminó convencida de que debía continuar con el embarazo, ya que cada vez que intentaba dejar la relación, esas apariciones se multiplicaban. Sin embargo, un mes después de dar a luz a su hijo, cuenta que recibió un mensaje por redes sociales que le reveló la verdad: su expareja había estado contratando actores durante 10 meses.

"Les decía los guiones que tenían que decirme cuando me vieran, les compraba la ropa y me dijeron que les decía que era para una cámara oculta", concluye Belén.