Las relaciones sentimentales están repletas de situaciones que son difíciles de afrontar y que, en muchas situaciones, nos llevan a mantenerlas a pesar de que sabemos que no es lo que más nos conviene.
Sobre este asunto ha hablado el experto en desarrollo personal Sergio Dueñas (@yosoysergioduenas), quien deja claro que "lo que no sueltas a tiempo por decisión, lo acabarás soltando por desgaste", algo que todo el mundo debería tener claro.
Aunque reconoce que en ocasiones cuesta soltar y uno mismo se convence de que se puede aguantar y de que es normal y todo tiene arreglo, es un pensamiento equivocado. En muchos casos, asegura que uno piensa que es posible que el día de mañana esa persona cambie y que, si se pone de nuestra parte, las cosas mejorarán.
El problema es que, como asegura Sergio Dueñas, "sin darte cuenta, lo que antes era amor se va a transformando en resistencia", pasando a convertirse en una persona que "ya no disfruta, solo sobrevive".
El experto en desarrollo personal hace hincapié en que el desgaste acaba llegando, ya sea por palabras que hieren, una promesa que no se cumple o un detalle que ya no existe, así como si se da "un silencio que duele más que cualquier grito".
Mientras una persona acumula y traga con las situaciones con el afán de "sostener lo insostenible", llega un día en el que te levantas y tienes la sensación de que "ya no queda amor, queda cansancio y rutina".
En ese momento parecen irse todas las ilusiones y ya no hay ni rastro de tener ganas de luchar por la relación. Es cuando se entiende que "lo que no soltaste a tiempo por decisión, la vida te obligó a soltarlo por desgaste".
Sergio asegura que "eso duele más", ya que no fue un acto de valentía, sino "el resultado de haberte traicionado a ti mismo demasiadas veces", tratando de sostener aquello que ya estaba roto. De ahí que recomiende aprender a soltar a tiempo y no esperar a que sea el desgaste lo que destruya lo que en algún momento de la vida te hacía feliz.
Cómo aprender a soltar
En algún momento de nuestra vida, todos nos hemos encontrado en la necesidad de dejar ir aquello que nos impide avanzar o nos provoca dolor de una u otra manera. Aprender a soltar no es una tarea fácil, pero es fundamental para poder disfrutar de un mayor bienestar mental y emocional.
Ya sea en una relación, un trabajo, una amistad o una etapa de la vida que ha llegado a su fin, aprender a soltar se trata de un proceso necesario, principalmente porque nos ayuda a liberarnos de cargas emocionales que pueden hacer que no avancemos.
El desapego no significa indiferencia, pero sí es clave para poder vivir en el presente sin tener que estar atado a emociones negativas del pasado. Es habitual que estemos aferrados a personas, situaciones o cosas que ya no nos aportan nada positivo.
Lo hacemos con frecuencia por miedo a la soledad o al cambio, pero ese apego puede llegar a ser muy dañino y limitante. Si se aprende a soltar, se dejan de lado esas cadenas y se permite una vida con mayor armonía y libertad.
Pasos para aprender a soltar
Si te estás preguntando cómo saltar una situación o persona, lo primero de todo es tomar conciencia de lo que se necesita dejar ir, un despertar que implica ser capaz de reconocer las emociones desagradables que nos indican que algo en nuestra vida se debe soltar.
Es imprescindible tener la capacidad de identificar estas señales y ser capaces de aceptar que el cambio es necesario para el bienestar de uno mismo. Tomar conciencia puede llegar a ser un proceso doloroso, ya que implica en muchos casos tener que abordar verdades incómodas.
Aunque sea de esta forma, es un paso fundamental para el desapego. Una persona debe estar dispuesta a mirar hacia adentro y reconocer lo que realmente le está provocando malestar, para que una vez que se identifiquen las fuentes de dolor, pueda soltarlas.
Por otro lado, los expertos insisten en la necesidad de ser capaz de enfrentar los miedos que cada uno pueda tener con respecto a lo que ocurra al liberarse de esa persona o situación. El miedo es una emoción que puede paralizarnos hasta el punto de mantenernos en situaciones insatisfactorias.
A partir de ahí, es necesario aprender a estar en soledad para afrontar el desapego, pues disfrutar de la propia compañía consigue fortalecernos a nivel emocional y nos hace ser menos dependientes de los demás.
Aunque la soledad se ve con cierto temor con frecuencia, no tiene por qué ser así, y aprender a estar en soledad permite desarrollar una relación más profunda y significativa con nosotros mismos.
Dentro del proceso para aprender a soltar es importante reconectar con vínculos para sanar las pérdidas, participando en actividades grupales, programar encuentros con amigos y seres queridos, etcétera.
Finalmente, es fundamental invertir en uno mismo, es fundamental para poder fortalecer la autoestima y la confianza. Esto implica dedicar tiempo y recursos a nuestro desarrollo personal, lo que permite enfrentar las pérdidas de manera más efectiva.
En este sentido, se recomienda establecer metas personales, aprender nuevas habilidades y disfrutar de momentos para el autocuidado, ya que todo ello sirve para sentirse más seguros y a aprender a soltar.
