Sara Carrasco
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Con los precios de la vivienda disparados y los sueldos que apenas crecen, muchas parejas se preguntan cuánto pueden gastar realmente en su primera casa.

Y es que entre hipotecas, ahorros y gastos del día a día, calcular el presupuesto del que no puedes pasarte no siempre es fácil.

Sin embargo, Antonio Costa lo explica de manera clara, ya que lo importante no es saber cuánto cobras sino hasta dónde se puede llegar con ese salario mensual.

"Con 1.800€ al mes cada uno, podéis optar a una casa de 350.000", explica Antonio en su cuenta de Instagram, quien ha resumido en cifras lo que muchos bancos tienen en cuenta a la hora de conceder una hipoteca.

Según sus cálculos, una persona que cobra 1.200 euros al mes podría aspirar a una vivienda de 233.333 euros, mientras que con un sueldo de 1.300 euros el tope subiría a 252.777. Quien gane 1.500 euros podría permitirse una casa de unos 291.666 euros, y así sucesivamente.

El economista advierte, sin embargo, que estos son límites orientativos. "Esto es lo máximo que os podríais permitir según vuestro sueldo, además de tener un 20%-30% aproximadamente de ahorros para la entrada y los gastos, y siempre y cuando no tengáis otras deudas o préstamos", aclara.

Es decir, no basta con ganar bien, también hay que tener dinero guardado y como es habitual, no estar endeudado.

Según sus estimaciones, una pareja que ingrese 2.000 euros al mes cada uno podría optar a una vivienda de 388.888 euros. Si el ingreso sube a 2.400 euros, el precio alcanzaría los 466.666 euros, y con 3.000 euros mensuales, se podría aspirar a una casa de 583.333 euros.

Antonio insiste en que el objetivo no es animar a gastar más, sino ayudar a entender los límites reales que tienen que existir en el presupuesto familiar.

Y es que muchas personas creen que el banco les va a dar todo el dinero, pero no es así. "Si no tienes ahorrado al menos un 20 o 30% del valor de la casa, la hipoteca no sale", explica.

Así que si quieres comprar una vivienda, es cierto que sigue siendo posible, pero exige planificación, estabilidad y ahorro.

Pues como resume Antonio, "comprar una casa no es solo pagar la hipoteca, es poder vivir tranquilos dentro de ella".