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    "Carrie Bradshaw ha dominado mi pulso profesional durante 27 años. Creo que la he amado más que a nadie. Sé que otros la han querido igual que yo. Se han frustrado, la han condenado y han apostado por ella". Con estas palabras se despidió, el pasado 1 de agosto, Sarah Jessica Parker del que fue su personaje emblemático durante casi tres décadas, tras el anuncio del final de la serie.

    La secuela de Sexo en Nueva York, And Just Like That..., termina tras tres temporadas, dejando para el recuerdo lecciones vitales esenciales, relacionadas con el amor y la amistad, pero también looks de ensueño que asientan la serie como una referencia de nuestro siglo.

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    El sentido del estilo, ampliamente abanderado por el personaje de Carrie, ha marcado las tres entregas y recuerda el impacto de la precuela y la legitimidad de la saga en conjunto. Ha supuesto un homenaje a la moda que muy pocas series han logrado, dando protagonismo a diseñadores y casas de referencia como Chanel o Valentino, pero también a talentos menos conocidos.

    Asimismo, la serie reavivó el interés por la moda vintage, ya que el vestuario mezclaba prendas de nombres contemporáneos con piezas icónicas de los años 80 y 90. La secuela de Sexo en Nueva York triunfó, asimismo, por apostar por la nostalgia, sin caer en el exceso: el bolso Baguette de Fendi y los zapatos de Manolo Blahnik reaparecieron de forma sutil, a modo de guiño.

    Su final marca, sin duda, el de una era y sobre todo de un personaje influyente desde finales de los 90. Carrie será recordada, entre otros motivos, por su pasión por la moda y su sentido del atrevimiento. La producción se convirtió en el escenario de un maximalismo de buen gusto, con siluetas voluminosas y coloridas, defendidas con brío por Sarah Jessica Parker.

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    Desde Magas, recopilamos algunos de los estilismos que destacaron en los últimos capítulos.

  • Transparencias

    Uno de los looks memorables de la actriz es este vestido de tul adornado con rosas rosadas de tallo largo, firmado por Simone Rocha. Destaca por su lencería negra visible y su parka a juego, que brinda volumen y delicadeza al conjunto.

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  • De encaje

    En esta escena, junto a Charlotte, interpretada por Kristin Davis, Parker apuesta por una tendencia infalible, el encaje, con este diseño de Simone Rocha, junto a una chaqueta vintage de Ann Demeulemeester, zapatos de Maison Margiela y un sombrero de ala ancha.

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  • '¡Layering'

    Es la reina de las superposiciones y lo recordamos en el capítulo 9 de la última temporada con este conjunto, en el que destaca este vestido de lino en tono verde y efecto corsé, obra de Lena Hoschek, que lleva con una camisa debajo.

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  • Bicolor

    Otra escena estelar junto a Charlotte, en la que Carrie confirmó el carácter infalible del dúo formado por el blanco y negro. En esta ocasión, lució un vestido de tirantes vintage de Liza Bruce sobre una camisa-vestido semitransparente.

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  • Con 'strass'

    Otro estilismo irresistible de la secuela es este vestido de manga larga, con diminutos cristales, que combina con unos stilettos plateados de Aquazzura y un bolso de hombro de Benedetta Bruzziches.

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  • Combinaciones de colores

    Entre las numerosas lecciones de estilo que nos dio, tiene obligada mención su capacidad de combinación de colores, incluso los más arriesgados. En la imagen deslumbra mezclando un top azul cielo con pantalones sastre en tono melocotón y sandalias de tiras de Aquazzura.

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  • Sencillez

    El estilo también reside en la simplicidad. Así nos lo demostró en varias ocasiones la protagonista de la serie con este look compuesto por una falda fruncida de Maison Margiela, combinado con un top nude de manga larga de Donna Karan y unos zapatos tipo Mary Jane blancos, también de Maison Margiela.

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  • 'Total look'

    Las propuestas monocromáticas también forman parte de los grandes éxitos estilísticos de Carrie. En la serie, brilla con este diseño de escote cruzado, de Bottega Veneta, a juego con su cinturón, sus sandalias y su bolso tipo bombonera.

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  • De fiesta

    Los looks de noche de Carrie fueron algunos de los más interesantes de And Just Like That... por su sofisticación. Entre ellos, destaca este vestido vintage de satén firmado por Vivienne Westwood, que la estrella combinó con un abrigo de Taller Marmo.
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  • Brillo

    En esta escena, junto a Cynthia Nixon, en la piel de Miranda, Carrie demuestra su maestría a la hora de combinar los tonos metalizados con los colores pop. En esta ocasión, une un vestido dorado con lazada y lunares XXL con una americana de hombreras marcadas en fucsia. 

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  • Maxivolumen

    En el capítulo An American Girl in Paris, Part Trois, Carrie nos dejó boquiabiertas con este espectacular vestido naranja de Valentino, parte de la colección Alta Costura primavera-verano 2019.

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  • Sofisticación natural

    Otros de los estilismos míticos está formado por una blusa azul con volantes de Yves Saint Laurent, una falda verde vintage con grandes bolsillos, un bolso rosa y tacones. Una combinación de colores y texturas sencillamente irresistible.

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