Este 2025, la casa italiana FENDI está de celebración: cumple sus 100 años de existencia. Adele y Edoardo Fendi fundaron la firma, primero como una pequeña boutique de artículos de cuero, en Roma, allá en 1925. Su éxito no tardó en llegar. Este 26 de febrero, en el marco de la Semana de la Moda de Milán, nos ha recordado su alcance.
Ante un front row compuesto por estrellas como Aitana, Boggi, Alex Riviere, Alexandra Pereira, Vicky Montanari, Alex Sánchez De Mora y Monica Anoz, entre otras, la casa ha desvelado una colección mixta, en homenaje a sus orígenes, sinónimo de calidad, tradición, experimentación y creatividad.
'1925-2025: Lo Spirito del Tempo' es toda una declaración de intenciones. "FENDI me recuerda al futuro. No quería pasar demasiado tiempo pensando en los archivos físicos. Para mí, FENDI 100 tiene más que ver con mis recuerdos personales, reales o imaginarios, de lo que FENDI fue y lo que FENDI significa hoy", comentó Silvia Venturini Fendi sobre su colección, que celebra el poder de la transmisión, de generación en generación.
La colección conjuga la ironía y el humor, con la sobriedad y la sensualidad. En este sentido, destacan diseños como un abrigo acampanado, lucido como vestido, con el cuello alto y la cintura ceñida con un cinturón de oro fino. Las técnicas de intarsia, nido de abeja y patchwork Gheronato se aplican a pieles que se asemejan al zorro, al visón y a la marta, pero que no lo son.
Siluetas del desfile de FENDI.
La silueta de reloj de arena, un guiño al infinito, deslumbra a través de faldas de satén, chaquetas corola con volantes y una manga redondeada. Los vestidos plisados jaspeados y de punto acanalado se disuelven en dobladillos de lechuga rizados, los patchworks de piel de anguila y cordero se despliegan en faldas chevron de línea A, en una amplia paleta cromática, marcada por el laurel, verde bosque, grafito, chocolate y azul petróleo, entre otros.
FENDI propone, asimismo, blazers con mangas de brazalete, gabardinas de corte grande en piel de cordero o con un cuello de bufanda en tafetán plisado. La estola de piel de oveja de FENDI se superpone como un cuello sastre sobre cárdigan en tono joya, preciosos vestidos lenceros o una blusa de georgette, ofreciendo la grandeza de un abrigo o la facilidad de un chal.
Por otra parte, la artesanía en cuero de los ateliers de FENDI triunfa en un par de abrigos Selleria acanalados en piel de ciervo y ante reversibles. Se suman faldas de satén acolchadas en ondas y duquesa drapeadas como una manga de obispo
En cuanto a complementos, destaca el nuevo FENDI Giano, un bolso click-clack en forma de luna. El FENDI Spy regresa deconstruido con un asa retorcida en tonos sorbete de borreguito, uniéndose al Peekaboo y al Baguette, popularizado en parte gracias a Sexo en Nueva York, como un icono perpetuo de la casa.
La colección rinde homenaje a los orígenes de FENDI.
Las botas trampantojo y las zapatillas peep-toe en satén y anguila juegan con una cuña delgada o un tacón ganchudo rematado con un destello de metal pulido, mientras que las botas safari para hombre están cortadas en piel de oveja salvaje y suave piel de cordero, según explica la maison.
Todo ello completado por una espectacular colección de joyas diseñada por Delfina Delettrez Fendi, que incluye collares de cadena de serpiente y pulseras en tremblant hasta pendientes de 'fuente' de araña, colgantes de obelisco de plata de ley y collares de cadena de bolas FF para hombre.
Con esta llamativa colección, FENDI ha recordado la amplitud de su trayectoria e impacto en el mundo de la moda. 100 años tras su creación, ha celebrado el poder de la artesanía y del lujo, en una de las ciudades de la moda más relevantes del mundo.