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Color natural
Este año se rehúye de lo artificial. Al menos en aspecto. Esta cadeneta de El Corte Inglés con toques frutales es ideal para decorar mesas, poner en pasamanos, encima de chimeneas o puertas.
Una de las tendencias decorativas son las naranjas, presentes en la propuesta. De hecho, desde Magas aconsejamos una divertida manualidad que se puede poner en práctica en familia: crear una corona a partir de rodajas del cítrico.
Aquí también incluyen la granada, que funciona haciéndole un guiño al rojo del acebo, un clásico de estas fechas.
Su precio es de 29,95 euros.
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Clásico renovado
A veces parece que la tradición de montar el Nacimiento se está perdiendo. Sin embargo, cada vez hay más opciones en cuanto a diseño que captan a las nuevas generaciones.
Los millennials son amantes de lo minimalista, por lo que este Misterio de seis piezas de El Corte Inglés (160 euros), donde se juega con la paleta de los neutros y las texturas, en los ropajes que llevan las piezas, está pensando para aquellos amantes de la Navidad que quieren algo más diferente al clásico exceso propio de esta época.
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Lazos
El clásico espumillón ha quedado un poco desplazado en las decoraciones navideñas de los últimos tiempos. Desde hace un par de temporadas, y en concreto esta, los lazos toman protagonismo en todo tipo de rincones.
Una de las apuestas más fuertes es la de decorar el árbol de forma íntegra con ellos. La opción clásica sería apostar por el burdeos, pero también irrumpen los tonos camel y beis o incluso el azul pato o grisáceo.
Para aquellos que quieren incluirlos en su abeto, pero que también desean conservar los adornos clásicos, una buena idea puede ser la de sustituir la estrella que corona al pino por una lazada grande, cuyos cabos alcancen el suelo.
Este modelo está disponible en Leroy Merlin, en pack de 24 unidades y cuesta 13,16 euros.
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Inconfundible
Apostar por un aroma que tenga el sello de Dyptique es hacerlo por el éxito. Encender una de sus velas es sinónimo de escuchar de forma reiterada un "¿a qué huele?". Y es que al prender la cerilla se liberan más que olores, sensaciones.
Esta esencia encierra entre sus notas la Navidad. Baies representa, según la web de la casa, "un jardín silvestre donde los acentos verdes y ácidos de las bayas recién recogidas revelan la fragancia floral y ligeramente especiada de las rosas frescas".
Una mezcla a medio camino entre la tradición, el invierno y el aspecto más delicado y romántico de estas fechas. El modelo clásico, —de 190 gramos— tiene un precio de 60 euros.
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Todo al rojo
Desde Sklum proponen esta corona que sustituye los clásicos verdes por el color del acebo, que lo inunda todo.
A pesar de tratarse de una propuesta minimalista, tiene la fuerza que infunde este tono, tan propio también de la época. Para decorar la entrada de casa o para darle vida a partir de ella a las mesas, incluyendo además velas que aporten calidez a diferentes rincones.
Su precio es de 19,95 euros.
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Un toque animal
Pero muy alejado de cualquier guiño que aluda a lo selvático. Este adorno de Zara Home se cuela en la lista de los más deseados. Se trata de un oso de peluche ataviado con materiales de esquí, solo que en lugar de descender por las lomas nevadas lo hace por las ramas de los árboles de Navidad.
A la venta por 9,99 euros.
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Destellos
Las estrellas abandonan lo más alto de los abetos y se instalan a ras de suelo, a sus pies, o comienzan a formar parte de rincones que se preparan en exclusiva para estas fiestas.
Este detalle de Maisons du Monde es perfecto para darle vida a esas mesas largas que ocupan las personas más especiales en las grandes citas de diciembre y enero.
El lote de tres tiene un precio de 17,97 euros. Otra idea sería decorar las ramas solo con este diseño y algún lazo.
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En bandeja de plata
Y con borde dorado. La tendencia de la mezcla de metalizados también se cuela, como no podía ser de otra forma, en las propuestas de estas fechas. Este modelo de Zara Home, disponible en dos tamaños —15,99 euros y 25,99 euros respectivamente—. es perfecto para montar tablas de quesos y embutidos o para presentar los dulces clásicos.
Además, es algo que se puede seguir utilizando a lo largo del año de forma indistinta, colándose además en recibidores e incluso dormitorios.
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Salvamanteles
Entrar en el mundo de Cristina Oria es colarse en un universo de fantasía para los amantes de la gastronomía y la decoración. Como de costumbre, de cara a esta temporada, han lanzado una serie de productos especiales entre los que se ha colado este bajoplato.
El diseño, disponible por 5,99 euros, se caracteriza por su borde dorado y por una serie de hendiduras con forma de árbol de Navidad.
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La guinda del pastel
Cada detalle cuenta, es lo que marca la diferencia en cualquier situación. Desde escuchar la voz de Michael Bublé de fondo mientras se abren cajas y desembalan adornos hasta ver la cara de ilusión en aquellos que miran con emoción determinados paquetes, intentando descifrar qué esconden los mismos.
Este papel de regalo de Zara Home es la forma perfecta de presentar los detalles de Papá Noel y los Reyes Magos.
Su precio es de 3,99 euros.
Ahora sí, la cuenta atrás ha finalizado. Las ventanitas de los calendarios de Adviento ya descubren lo que esconden. De pronto, la casa se convierte en refugio y le da más sentido que nunca a la palabra familia. Las estancias son más acogedoras y se aprenden a apreciar desde otro prisma. Y es que con la Navidad, ese niño interior que a veces parece perdido en algunos hace de nuevo acto de presencia.
Esa ilusión comienza cuando las cajas que guardan ramas verdes y adornos rojos comienzan a abandonar altillos y reescriben la historia propia de estas fechas. Cada año, hay propuestas que pasan a formar parte de la tradición. Aunque haya una base establecida, durante el mes de diciembre surgen nuevas incorporaciones a la colección de detalles decorativos.
Entre las tendencias de este año habitan los tonos suaves —blancos rotos, verdes abetos profundos, dorados empolvados— al igual que las texturas gustosas y cálidas: el lino suave, la cerámica rugosa, el vidrio imperfecto, el terciopelo de los lazos que sustituyen en muchos casos a las míticas guirnaldas de espumillón…
De este modo, los adornos se convierten en una suerte de pequeños talismanes. Objetos que se cuelan en la lista de deseos no solo por sus formas o diseño, sino por lo que pueden contar.
Bolas artesanales, recuerdos de viajes, ornamentos metálicos que recuerdan al invierno más puro y estrellas que abandonan los abetos y pinos para colarse en centros de mesa. Un reflejo de quiénes somos.
Este mismo rincón, que alberga las comidas más fastuosas de la época, marcadas en realidad por la buena compañía, cobra un protagonismo especial.
Un ramo de ramas verdes recién cortadas, las copas perfectas para brindar, bajoplatos que liberen a ese mantel tan especial cuya identidad salvaguardan los cajones de cómodas y vitrinas de un año a otro… Cada detalle cuenta y personaliza el ambiente, habla de aquellos que se esfuerzan por mostrar su esencia en cada gesto.
Por último, el aroma. Y es que ninguna Navidad está completa sin su perfume. Notas de bosque, el musgo, la chimenea, el ámbar, especias suaves… Ese olor que permanece incluso cuando el árbol ya se encuentra perfectamente embalado, de vuelta en su caja, esperando a que el calendario de nuevo deshoje sus páginas.
Zara Home, El Corte Inglés, Maisons du Monde o Sklum esconden algunas de las mejores ideas para disfrutar en estas semanas.