Poner en pie una clínica de medicina estética no es sencillo ni barato. Tanto la inversión inicial como las nóminas a pagar de los profesionales que forman parte del equipo, supone un desembolso inicial difícil de llevar a cabo.
Carmen Cintero, experta en el campo de la estética, afirma que se tiene que "contratar un perfil de médicos que cobran muchísimo dinero".
Pero, ¿cuánto es "muchísimo"? Según explica, "mínimo unos 20.000 € mensuales" para un cirujano plástico; un médico estético, mientras tanto, cobra por servicio, entre 60 y 100 euros la hora.
A pesar de lo sencillo que puede parecer gestionar una clínica estética, no es un negocio fácil, por el simple hecho de vivir del boom de la demanda.
La propia Cintero confirma que no es fácil gestionar una clínica estética debido al alto precio de sus profesionales, sin embargo, se recupera la inversión con creces. "Solo el primer mes ganamos unos 150-200.000 euros", afirma la empresaria.
Sueldos en medicina estética
Los salarios pagados en las clínicas estéticas están justificados por ser un oficio altamente cualificado, con años de formación, responsabilidad quirúrgica y alto riesgo médico-legal.
La marca personal del cirujano, su cartera de pacientes y su experiencia en quirófano son palancas que encarecen la nómina y sostienen la reputación de la clínica.
En el otro gran perfil, el médico estético, el que realiza tratamientos no quirúrgicos, el esquema cambia: "un médico estético puede estar cobrando la hora entre 60 y 100 € la hora.
Aquí el ingreso se vincula a actos médicos (infiltraciones, neuromoduladores, bioestimuladores, etc.), con una rotación alta de pacientes y jornadas muy optimizadas.
El precio de la clínica
Todo ello sin hablar de que la buena parte de las intervenciones se realizan en hospitales, por tiempos regulatorios y seguridad del paciente, por lo que también hay que pagar una alta suma de dinero. La logística es clave para entender costes y salarios.
Hay excepciones de procedimientos cortos, como cita la experta: "hay cirugías como una blefaroplastia, un aumento de pecho simple o cirugías que ronden en torno a los 40–50 minutos; si tienes una sala blanca, un quirófano así pequeñito en la propia clínica, lo podrías hacer."
Entonces, ¿por qué elegir el hospital? Dos razones decisivas:
- Tiempos regulatorios y de apertura: "lo primero que a nivel tema sanitario se te va muchísimo en tiempo, entonces tardas muchísimo en poder abrir la clínica."
- Seguridad del paciente: "por seguridad yo prefiero hacerlo en un hospital, porque hay cualquier anomalía, cualquier cosa, tienes una UCI y tienes todos los profesionales sanitarios."
En otras palabras, aunque disponer de quirófano propio es posible, operar en hospital reduce riesgos y evita retrasos administrativos que pueden dejar meses sin facturar a un proyecto recién lanzado.
La demanda de este negocio es sostenida: tratamientos preventivos, resultados naturales, tiempos de recuperación cortos y normalización social.
Pero crecer no significa abaratar a cualquier precio. Como resume Cintero, el corazón del negocio es contar con médicos excelentes, y eso se paga. La alternativa, ahorrar donde no se debe, sale carísima: en reputación y, sobre todo, en salud.
