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La casquería ha sido durante siglos una parte fundamental de la cocina tradicional española. En épocas de escasez, era una fuente importante de alimento para la población, en gran parte debido a su bajo precio.

En la actualidad, a pesar de que su consumo ha ascendido, son muchos los españoles que rechazan su consumo, pero no todos, ya que algunos todavía disfrutan de su sabor, como Ana Belén.

Según las palabras de su marido, Víctor Manuel, en su libro 'El gusto es mío', la cantante madrileña "adora" la casquería. Estos órganos y vísceras de animales son, a pesar de su sabor odiado por muchos, uno de los alimentos con mayor densidad nutricional.

Los beneficios de la casquería

Cuando hablamos de casquería nos referimos a las partes comestibles de los animales que no son carne propiamente dicha, como las vísceras, la cabeza, las patas, y el rabo.

En la cocina, se divide tradicionalmente en casquería blanca y roja, cada una con sus propias características culinarias y nutricionales.

Aunque con el tiempo su consumo en España ha disminuido, este alimento puede formar parte de una dieta equilibrada, rica y sobre todo nutritiva.

Los órganos y vísceras que componen la casquería son auténticos tesoros nutricionales. Uno de los principales beneficios de la casquería es su altísimo contenido en proteínas de alto valor biológico.

Estas proteínas contienen todos los aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita, por lo que son de especial interés para el mantenimiento y la regeneración de los tejidos, especialmente el muscular y el conectivo.

Algo que, en cierta forma, podría explicar el excelente estado de la cantante a sus 74 años de edad. Además, muchas piezas de casquería son muy ricas en colágeno, una proteína esencial para mantener la elasticidad de la piel.

Ana Belén.

Su consumo puede favorecer la regeneración articular y mejorar el estado de las articulaciones, sobre todo en personas mayores o deportistas.

Más allá de las proteínas, la casquería es una fuente extraordinaria de micronutrientes que son difíciles de encontrar en la misma concentración en otros alimentos.

El hígado, por ejemplo, contiene grandes cantidades de hierro hemo, que se absorbe con mayor facilidad que el hierro de origen vegetal, y es fundamental para prevenir la anemia y mantener la energía diaria.

En términos culinarios y aunque muchas personas no lo crean, la casquería ofrece una enorme versatilidad. Puede cocinarse en guisos o frituras, pero también en platos más elaborados.