En la actualidad, Corea del Sur es conocida por su enfoque en la innovación en el cuidado de la piel y la investigación constante de nuevos ingredientes y tecnologías. Solo hace falta ver como la cosmética del país ha revolucionado el mundo de la belleza y ha conseguido que todas las personas en el mundo quieran saber cómo las coreanas consiguen ese rostro de porcelana y esa tez sacada de película. 

A todos nos encantaría conseguir ese resultado, por eso el mantenimiento sano de la piel se ha vuelto tendencia en los últimos años. El skincare se ha convertido en un fenómeno mundial e, incluso, personas que jamás se han preocupado por escoger entre las estanterías los mejores jabones, han caído en la tentación y ya acumulan tónicos, sérums y cremas. 

Esa necesidad lleva en Corea desde hace siglos. Las mujeres se esforzaban por encontrar los mejores remedios caseros y productos para conseguir un rostro envidiable y duradero con el paso del tiempo. Su efecto fue tan eficaz, que aquellas coreanas que actualmente no se preocupan por elegir los mejores cosméticos para la piel, es porque sus abuelas les dejaron la tarea hecha desde pequeñas. 

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Así ha pasado con el agua de arroz. Un ingrediente tan simple, asequible y versátil ha sido el secreto del rostro de porcelana en Corea durante los siglos, cuando lo empleaban para reducir los signos del envejecimiento de la piel, eliminar las manchas de la edad, disminuir las líneas de expresión e incluso, tratar el acné en los momentos en los que las cremas innovadoras no existían.

El agua de arroz se presentó como la mejor alternativa. Con el paso del tiempo, se demostró su eficacia y a pesar de tener más de cien años, ahora ha vuelto a ser tendencia. Incluso, los expertos en cosmética han estado promocionando sus beneficios capaces de brindar al rostro una tez radiante y flexible, únicamente aplicando la mezcla en el rostro.

El agua de arroz es el truco más valorado de las coreanas

Todos alguna vez en la vida hemos tenido el agua de arroz en nuestra cocina, al final, se trata de agua con almidón que queda después de remojar o hervir el alimento. En Asia se empleaba como un tratamiento de belleza gracias a las vitaminas, minerales y compuestos que podrían ser beneficiosos para la piel, como antioxidantes y aminoácidos.

Esta combinación contiene gamma oryzanol, una mezcla de sustancias derivadas del agua de arroz que ayuda a combatir los rayos UV y el daño de los radicales libres. Además, el alimento también destaca por sus componentes antioxidantes como la vitamina A, C, E y flavonoides, que ayudan a mejorar la textura general de la piel y combatir el envejecimiento.

Otro ingrediente beneficioso disponible en el agua de arroz es el ácido kójico, un inhibidor de la tirosinasa que ayuda a reducir la producción de melanina y, por lo tanto, mejora la apariencia de la piel gracias a su efecto antienvejecimiento. Así como reducir las líneas de expresión, también trata la hiperpigmentación o las manchas concurrentes en el rostro.

El agua de arroz también tiene propiedades iluminadoras de la piel, lo que resume el motivo por el que el rostro de las coreanas luce siempre hidratado. Esta mezcla suele ser elogiada por su potencial para aclarar e igualar el tono de la piel. Su almidón calma y reduce el enrojecimiento, lo que da como resultado la famosa tez radiante 'de porcelana'.

Los estudios han demostrado que no es un compuesto irritante, lo que lo hace seguro y beneficioso para todos los tipos de piel. Constituye una forma muy suave de tratar el rostro, iluminar la piel e hidratarla. En tan solo unos días, se pueden ver los resultados; sin embargo, si queremos duplicar sus efectos, resulta clave no dejar que el agua de arroz seque la piel. Para ello, tenemos que emplear después nuestros productos tradicionales, es decir, cremas hidratantes y protectores solares. 

Como añadir el agua de arroz en nuestra rutina

Antes de saber como se puede añadir el agua de arroz en nuestra rutina, lo primordial es conocer qué debemos hacer para prepararlo. El alimento debe lavarse al menos dos veces para eliminar cualquier impureza o residuo presente entre los granos que pueda suponer que una vez lo apliquemos, se impregnen sobre la piel. Estas son las formas en las que se pueden incorporar: 

  • Lavado de agua de arroz. La forma más tradicional de emplear el tratamiento coreano es un lavado normal. Con el agua de arroz en un recipiente, vamos a posicionarlo sobre el rostro a toquecitos, dejando que penetre. Después, simplemente enjuagaremos el rostro.
  • Bruma facial de agua de arroz. Para llevar el agua de arroz con nosotros, vamos a verter la mezcla en una botella con atomizador y vamos a usarla como bruma facial durante todo el día. Podemos rociarlo después de la limpieza, antes de aplicar maquillaje o cuando necesitemos un impulso de hidratación.
  • Mascarilla facial. Podemos realizar una mascarilla de agua de arroz mezclándola con otros ingredientes naturales, como yogur, miel o aloe vera. Aplicaremos la mezcla en nuestro rostro durante unos 15 a 20 minutos y luego enjuagaremos con agua.
  • Tónico de agua de arroz. Una de las maneras más simples de emplear el agua de arroz es emplearlo como tónico con ayuda de un disco de algodón. Frotándolo sobre el rostro, vamos a hacer énfasis en las áreas que necesiten más tratamiento y dejaremos que se seque al aire libre. 

De cara a almacenar el arroz, se puede guardar en un recipiente limpio y hermético, como un frasco de vidrio o la botella con atomizador, hasta por una semana en el frigorífico. Después de ese tiempo, es mejor tirar la mezcla y hacer una nueva, que se pueda mantener por otros siete días.