En el mercado de vehículos eléctricos de ocasión, elegir bien puede marcar la diferencia entre una compra inteligente y un error costoso. Así lo demostró el mecánico y experto en coches eléctricos José, en una entrevista junto a Pascual, propietario de un Tesla Model 3 Standard Range de 2019, quien compartió su experiencia tras más de 120.000 kilómetros recorridos. Ambos coincidieron en que este modelo se ha convertido en una de las opciones más rentables dentro del mercado de segunda mano, tanto por su eficiencia energética como por su bajo mantenimiento.
Un coche eficiente y con bajo coste por kilómetro
A través de una charla en el canal de YouTube Victric, el Tesla analizado fue importado con 73.000 km en 2023 y costó alrededor de 25.000 euros, frente a los 48.000 euros que valía nuevo. Hoy, versiones similares pueden encontrarse incluso por debajo de los 20.000 euros.
Pascual explicó que recorre cerca de 1.000 kilómetros al mes gastando apenas 6 euros en electricidad, gracias a la carga doméstica o en puntos públicos a tarifas reducidas. “Consume muy poco viaje largo. A pesar de tener una batería pequeña, se le puede sacar mucha autonomía”, comentó satisfecho.
José, por su parte, destacó que la refrigeración líquida de las baterías es una de las claves de su durabilidad: “Si la refrigeración es buena, el coche mantendrá más tiempo la potencia de carga alta”. El vehículo, con una batería NCM de 50 kWh, ofrece unos 300 km reales de autonomía y puede recuperar más de 150 km en apenas 25 minutos de carga rápida.
Mantenimiento casi inexistente y degradación moderada
Respecto al mantenimiento del Model 3, Pascual reveló que este ha sido mínimo: solo ha cambiado ruedas, filtros y limpiaparabrisas en dos años. José señaló que “los motores eléctricos no suelen dar problemas” y que, en general, las degradaciones de batería en estos Tesla rondan entre el 10% y el 12% tras cinco años de uso, una cifra considerada normal en la industria.
“En los modelos nuevos ya no hay degradación excesiva. Con el paso de los años, Tesla ha mejorado la gestión térmica y el software de carga”, explicó el experto.
A nivel estructural, ambos coincidieron en que los problemas de suspensión o brazos de control son menores y comparables a los de cualquier coche de combustión. Además, la carrocería tipo berlina ofrece un maletero amplio y un comportamiento muy estable en carretera, aunque algo menos práctico para uso urbano.
Una inversión inteligente en el mercado eléctrico
A la pregunta clave, si este Tesla compensa frente a un coche de combustión, José fue claro: “Un modelo similar en prestaciones te costará el triple y gastará diez veces más. Además, te libras de problemas de turbo, inyección o filtro de partículas”.
El mecánico concluyó que el Tesla Model 3 Standard Range es una compra ideal para quienes buscan iniciarse en la movilidad eléctrica sin superar los 20.000 euros. “Es una de las mejores opciones para viajar con tranquilidad y disfrutar del sistema de supercargadores de Tesla”, afirmó Pascual.
