Un experto en coches analiza el DFSK 500, un SUV chino que apunta directo al mercado más competitivo de España. Este modelo combina un diseño atractivo, una buena relación calidad-precio y un precio de partida desde 16.995 euros, posicionándose como una de las opciones automáticas más económicas del país.
Un SUV chino que sorprende por su equilibrio entre calidad y precio
Borja Díaz, redactor de Car and Driver, describe al DFSK 500 como un SUV asequible, versátil y compacto, a medio camino entre los segmentos B y C. Según el periodista, “presume de ser un SUV con un interior muy agradable tanto por diseño como por acabados”.
Su motor de gasolina compatible con GLP le permite acceder a la etiqueta ECO de la DGT, lo que lo convierte en una alternativa práctica para la conducción urbana.
El experto en coches destaca que este modelo de DFSK ofrece una combinación interesante para cualquiera: bajo coste, diseño cuidado y una autonomía que puede superar los 1.000 kilómetros en las versiones con GLP.
Además, resalta que la marca ofrece uno de los coches con cambio automático más baratos en España, sumando una garantía de siete años y un equipamiento correcto en su gama.
DFSK 500
Diseño atractivo y una conducción sin pretensiones
El DFSK 500 mantiene líneas reconocibles dentro de la marca, con detalles como su techo flotante, una gran parrilla frontal y una zaga redondeada con pilotos LED. En el interior, el especialista menciona el buen gusto en los materiales y la sencillez del conjunto. “Todo es muy sencillo, con un cierto aire minimalista”, opina.
En la conducción, el modelo se muestra cómodo para desplazamientos diarios. Aunque no brilla por su dinamismo, Díaz asegura que “cumple correctamente a la hora de transportar a sus ocupantes sin ningún tipo de pretensiones”.
La suspensión filtra bien las irregularidades y los frenos aportan seguridad, aunque la dirección “no logra comunicar lo que sucede debajo de las ruedas delanteras”.
El propulsor, un 1.5 litros de 106 CV, se combina con una transmisión automática CVT que responde bien en ciudad, aunque pierde agilidad en adelantamientos. En su prueba, el consumo medio con GLP fue de 8,0 litros cada 100 kilómetros, lo que refuerza su perfil eficiente.
