Los protagonistas habituales de la cuenta @desguacemotocoche han vuelto a dar que hablar en TikTok con un vídeo que ha generado miles de reacciones. En esta ocasión, Paco decide sorprender a Trini con un coche nuevo. Pero la sorpresa no sale como esperaba: lejos de emocionarse, ella muestra su enfado. ¿El motivo? El flamante Tesla que le ha comprado no solo está cubierto de polvo, sino que, según ella, “es medio coche chino”.
Trini se sube al coche y no tarda en poner cara de pocos amigos. Ha acabado hecha un desastre y, para colmo, el vehículo ni arranca. Paco, su compañero, intenta calmar los ánimos con lo que él cree que es una buena noticia: le ha comprado un Tesla. Pero lejos de celebrar el gesto, la cosa se tuerce.
Porque el coche, en realidad, no está pagado. Y lo peor no es eso. Según cuenta Paco, el precio no para de subir. Empezaron hablando de 36.000 euros y ya va por 50.000. ¿La razón? El Culebra, el vendedor, va inflando la cifra, mientras él asume resignado que está pagando medio Tesla... y medio coche chino.
Trini, incrédula, pregunta: “¿Pero si es de Estados Unidos?”. A lo que el otro protagonista de la cuenta, le asegura que es de China. Y ella, al comprobarlo, se indigna aún más: “¡Es verdad, Paco, mira la cremallera: made in China!”. Incluso la pantalla, según Paco, “marca AVON”, que, según él, es “una empresa de Shanghái”.
La gota que colma el vaso llega cuando Trini lanza una inesperada declaración: “Yo ya no quiero un Tesla, Paco. Yo prefiero un Seat Ibiza que es español… y además tiene uno la vecina del cuarto, la Paqui”.
Los tiktokers consiguen retratar una escena cada vez más común: la frustración de quien ve cómo su pareja acumula coches... que nunca funcionan. Trini, agotada de la obsesión de Paco por los vehículos, y del gasto que suponen, acaba explotando. Porque mientras él presume de coche nuevo, ella sigue yendo en autobús.
Este vídeo retrata uno de los dilemas más comunes entre quienes se lanzan al coche eléctrico sin leer la letra pequeña: precios que se disparan, reparaciones interminables y promesas que, al final, no arrancan.