Con apenas 23 años, Irati Etxandi se ha convertido en una de las voces más jóvenes del mundo del motor en TikTok. Mecánica y electricista de coches, esta joven vasca ha conquistado a miles de usuarios con un relato sin artificios: cómo empezó en el taller familiar, qué la llevó a elegir la automoción como camino profesional y qué luces y sombras tiene un oficio que, a día de hoy, sigue siendo poco común entre mujeres jóvenes. Todo contado con cercanía, claridad y sin filtros, desde su cuenta @iratietxandi.
Bajo el hashtag #cargirl, la creadora de contenido lanza un mensaje que inspira a su comunidad: ser mecánica es mucho más que reparar coches. “Te ayuda a afrontar los problemas o imprevistos de una manera buena”, asegura que cada jornada en el taller es una oportunidad para aprender algo nuevo.
Y no habla desde una perspectiva idealizada: reconoce que hay partes duras, como los trabajos que se complican o requieren muchas horas, pero insiste en que la satisfacción de lograrlo compensa todo.
A través de su cuenta de TikTok, se ha convertido en un ejemplo de cómo el sector de la automoción también tiene hueco para perfiles jóvenes, con iniciativa y vocación.
“Creo que es una buena salida profesional para los jóvenes que todavía no saben qué estudiar”, afirma, y aunque sea un oficio exigente, ofrece estabilidad, aprendizaje constante y orgullo por el trabajo bien hecho.
En el vídeo se ha expresado con mucha naturalidad y expresando una profunda pasión por su trabajo. De hecho, ha tenido un gran impacto entre estudiantes y personas que están planteándose qué rumbo tomar en su vida laboral.
Su tono honesto, alejado de tópicos y con una mirada personal, ha despertado reacciones de todo tipo, especialmente positivas.
“Si volviera atrás en el tiempo, no dudaría en volver a escoger esta profesión”, asevera la joven en su vídeo. Y esa frase, dicha con una sonrisa y rodeada de herramientas, resume mejor que ninguna otra por qué su historia está conectando con tanta gente.
Porque a veces, entre aceite, motores y diagnosis electrónica, también hay espacio para referentes. Y en el taller de la creadora de contenido la vocación suena tan fuerte como cualquier motor bien afinado.