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Cuando todos pensábamos ya que el verano se había marchado, y no solo en el calendario, los termómetros nos han vuelto a dar un golpe de realidad. Muchos creían que el calor era una cosa del pasado, pero durante estos días ha vuelto con fuerza. Sobre todo en puntos como Madrid.

Y es que hay zonas de la Comunidad que registran unas temperaturas máximas verdaderamente asfixiantes. Más propias del pleno mes de agosto que de las postrimerías de la época estival. El verano finalizará en unos días, pero lo va a hacer dando más guerra que nunca.

La capital de España estará en alerta amarilla por temperaturas máximas durante la jornada de este jueves tal y como ha manifestado la Agencia Estatal de Meteorología. Algunas zonas de la comunidad se encuentran bajo advertencia tras una repentina subida de los mercurios que va acompañada de cielos claros, sobre todo durante buena parte del día.

Además, esta será la antesala de un cambio en la climatología que se avecina para este fin de semana con el regreso de las lluvias para poner punto y final a un verano que ha sido de lo más polémico. Una dura etapa con registros históricos que ha causado estragos en la sociedad.

Sin embargo, poco a poco el clima irá cambiando según nos aproximemos al domingo y, sobre todo, a la semana que viene, cuando habrá un giro radical. La nubosidad irá in crescendo y las altísimas temperaturas caerán en picado con mínimas que bajarán incluso de los 10 grados.

Calor extremo para dejar el verano

Madrid se despide del verano con sufrimiento. Y es que a pesar de que solo quedan unos días para que se consuma la estación, los habitantes de la capital, y todos los que pasen por ella, tendrán que estar prevenidos para intentar hacer frente a un calor, cuanto menos, sofocante.

Y es que aunque no se vayan a alcanzar temperaturas de 40 grados, lo cierto es que el calor que va a hacer en la recta final de septiembre va a ser anormal, según los expertos. Las mínimas se van a mantener estables durante lo que resta de semana, oscilando entre los 20 y los 22 grados.

Sin embargo, las máximas van a poner a prueba la paciencia de más de uno, subiendo incluso hasta los 35 y 36 grados en el área metropolitana y el Corredor del Henares. Aunque la palma se la llevarán municipios como Las Rozas o Brunete, donde el calor apretará especialmente.

Donde sí habrá una evolución notable será en la nubosidad, la cual irá aumentando a medida que avance el fin de semana hasta desembocar en un domingo en el que podrían aparecer algunas lluvias. Todo antes de la llegada de un frente frío que marcará la próxima semana con la entrada del otoño más fuerte de lo previsto.