Llegó a Madrid en pleno mes de agosto, sin saber exactamente qué esperar, y a pesar de las altas temperaturas que sufre estos días la capital, pasear por sus calles parece que la ha dejado sin palabras.
"Es la primera vez, así que flipé, aluciné, de bar en bar, conociendo a un montón de gente. Fue muy divertido, son cosas que solo pasan en España y la verdad que es impresionante", cuenta una joven turista argentina que ha viajado a la capital para disfrutar de un verano diferente y se ha topado con una de las fiestas más tradicionales de la ciudad.
Y es que sin quererlo, desde el pasado 9 de agosto, la joven ha estado disfrutando de las Fiestas de San Lorenzo, unas celebraciones que tienen lugar en el barrio de Lavapiés, llenando las calles de música, colores y un ambiente festivo que contagia a cualquiera que pase por allí.
Fiestas de San Lorenzo 2025.
Esta argentina, que venía con la idea de recorrer algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, ha terminado encontrándose con una Madrid de barrio, auténtica y viva, donde las tradiciones se mezclan con la alegría de vecinos y turistas por igual.
Durante las fiestas, las calles se engalanan con guirnaldas y banderines, y no faltan las barras al aire libre donde se sirven bebidas y tapas a buen precio.
Según cuenta la turista en Telemadrid, lo que más le ha llamado la atención en estos días ha sido la forma en que la gente se relaciona en este tipo de eventos.
La argentina alucinaba con que todos se saludasen como viejos amigos o que en cada calle surgieran conversaciones con todo el que estuviera disfrutando en las terrazas. Un ambiente de cercanía que, según ella, no es tan común de ver en grandes ciudades como esta.
El barrio de Lavapiés se engalana.
Las fiestas de San Lorenzo forman parte de un ciclo de celebraciones populares que, junto con las de San Cayetano y la Virgen de la Paloma, animan el verano madrileño.
Durante cuatro días, el barrio se ha convertido en un gran escenario al aire libre con conciertos, bailes, concursos y actividades para todas las edades.
No obstante, los bares y peñas del barrio también juegan un papel importante en estas fechas, ya que, muchos de ellos, organizan eventos propios que se suman al programa oficial.
Ahora, quienes no hayan podido vivir estas fiestas, todavía están a tiempo de sumarse a la tradición hasta el 15 de agosto. Y es que aunque San Lorenzo ya ha acabado, el centro de Madrid sigue de fiesta con la Virgen de la Paloma.
Así, antes de volver a su país, la joven no ha dudado en recomendar la experiencia a todo aquel que aún esté indeciso, y es que como dijo desde el principio, "son cosas que solo pasan en España".
