Malaguilla (Guadalajara)

En la parroquia de Malaguilla no doblan las campanas este lunes. Si lo hicieran, sería por Carolina, la mujer brutalmente asesinada este sábado por su expareja en Getafe. Es aquí, en este remoto pueblo de la provincia de Guadalajara, donde Carolina y su presunto asesino, Daniel, decidieron compartir un futuro que nunca llegó. 

Lo que sí llegó fue una denuncia por malos tratos en febrero de este año. Lo que llegó, el pasado sábado, fueron varias puñaladas en plena calle del Sector 3 de Getafe. Lo que llegó fue una coartada falsa que duró menos de un día. 

Lo que llegó, en definitiva, fue el último asesinato machista en España, el número 52 en 2023. Y todo empezó en un chalé adosado de 137 metros cuadrados, donde Carolina y Daniel apostaron por una vida en común, alejados del bullicio y abrazando la quietud de la naturaleza. 

El español y la colombiana

El año pasado, el Ayuntamiento de Malaguilla, en el extremo noroeste de La Alcarria, consiguió sacar a la venta una promoción de chalés que habían quedado "desvalijados y en concurso de acreedores", de los tiempos del ladrillazo.  

"Por medio de la SAREB conseguimos vender 37. Vino una parejita y compró uno", explica el alcalde de la localidad, Ángel Aparicio, mientras coloca las banderas del Consistorio a media asta en señal de luto.

Esa pareja la componían Daniel Monroy Iglesias y Carolina Vivas Castañeda, de 50 y 39 años, respectivamente. Él es español y ella era colombiana. "Estuvieron viviendo aquí desde julio de 2022 hasta febrero de 2023", es decir, ocho meses.

"Vinieron primero ellos y luego algunos familiares de ella. Pero fueron muy poquitos meses", prosigue el alcalde. Fue tan poco el tiempo que pasaron en el pueblo que hay vecinos que nunca se los han cruzado. Además, la zona en la que vivían es una urbanización donde abundan las segundas residencias.

Ángel Aparicio, alcalde de Malaguilla, coloca las banderas del Ayuntamiento a media asta. Jaime Susanna

"Daban la impresión de ser una pareja muy normal". Sin embargo, en febrero todo se torció. Un día del pasado invierno los vecinos "tuvieron que llamar a la Guardia Civil" por las voces que salían del adosado que compartía la pareja. "Tuvieron una trifulca". 

Desde aquel día, Carolina denunció a Daniel por malos tratos y se mudó a Getafe. El delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, ha indicado este lunes que el hombre tenía antecedentes por violencia de género y que la víctima había estado en el Sistema Integral de Protección de Víctimas de Violencia de Género (VioGén). 

Carolina "solicitó expresamente que se retiraran las medidas cautelares de protección y, como consecuencia de ello, quedó como inactiva dentro del sistema" el pasado abril. 

Desde su separación, la mujer no volvió a ser vista en Malaguilla. Él, en cambio, "ha estado deambulando, que si va y viene", detalla el alcalde. "El chalé lo deben tener alquilado porque ahora vive gente que no conocemos".

La casa, visiblemente destartalada, está actualmente a la venta en el portal Idealista por 95.000 euros. El titular del anuncio no es otro que el presunto asesino. 

El crimen

La tarde del pasado sábado, Daniel tomó su Citroën C4 Picasso y se desplazó hasta la Avenida Arcas del Agua, en Getafe, donde encaró a la víctima. Según los testimonios recabados por este periódico la tarde del crimen, un testigo observó a Carolina y a un hombre "discutiendo" en la calle, a la altura de la iglesia de Nuestra Señora de Buenavista.

La víctima cruzó la calzada "huyendo" de él, que la perseguía y actuaba con "malos modos". Finalmente, acabó asestándola varias puñaladas en el pecho con un arma blanca. 

Lugar de la Avenida de las Arcas del Agua donde murió Carolina, una mujer colombiana de 39 años, tras recibir varias puñaladas presuntamente a manos de su expareja. M. F. El Español

Los servicios de emergencias del 112 de la Comunidad de Madrid recibieron el aviso sobre las 13:40 horas. Cuando llegaron la mujer estaba agonizando y, finalmente, murió. El grupo VI de Homicidios de la Policía Nacional abrió la investigación de un asesinato. 

La falsa coartada

Daniel se presentó la madrugada del domingo en dependencias policiales de Getafe para declarar. Los agentes le tomaron declaración "como testigo", según detallan fuentes policiales. No había, por el momento, pruebas que incriminaran a este hombre de 50 años que ha trabajado como técnico informático y albañil. 

Una vez conocida su versión, su posible coartada, fue puesto en libertad. La propia alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, anunció en sus redes sociales la detención de Daniel. 

"Acaban de informarme que el Cuerpo Nacional de Policía ha detenido al sospechoso del asesinato machista de ayer en plena calle de Getafe. Espero que todo el peso de la justicia aclare este terrible suceso y tome las medidas contundentes y necesarias", escribió en X (antes Twitter).

Sin embargo, Daniel no fue detenido como presunto autor del crimen hasta este lunes. Los agentes del Grupo VI de Homicidios continuaron con la investigación y le detuvieron, esta vez sí, a las pocas horas al encontrar nuevos indicios de su participación en los hechos.

El presunto asesino de Carolina es detenido por la Policía Nacional. PN

Este crimen ha conmocionado a dos localidades, de dos provincias, separadas por más de 100 kilómetros. Getafe celebró este lunes un minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento en repulsa por este crimen. Este martes, está convocado otro minuto de silencio en Malaguilla, la localidad alcarreña donde Carolina pensó que podría ser feliz. Lo nunca visto en un pueblo que no llega a los 200 habitantes.