La reforma del piso del novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha vuelto a protagonizar la sesión de control en la Asamblea de Madrid. Una nueva jornada en la que la Cámara que fiscaliza la gestión del Gobierno regional ha parecido más una búsqueda rápida por Idealista que el control de una Administración que coordina 27.558 millones de euros.
Que si "obras ilegales", que si "las goteras que generó a su vecino de abajo" que si el bar de abajo tuvo que cerrar por "vertidos de aguas fecales"... Toda una ristra de acusaciones a las que la líder del PP de Madrid ha respondido con ironía y que la oposición se toma como algo "primordial".
Y es que, Ayuso no se toma en serio todas las acusaciones, pues considera que debe fiscalizar su "gestión" y no su "vida sentimental".
"¿Puso suelo radiante o calefacción central convencional? ¿Orientó el aire acondicionado mirando al norte, al sur o en la azotea? ¿Creen que tenemos que llegar a algo tan absurdo?", ironizaba la líder de la región. Lo que ha hecho después de que la portavoz de Más Madrid, Manuela Bergerot, se haya preguntado si puede gestionar una región cuando su pareja, haciendo obras, provoca "goteras" a sus vecinos.
Tanto Bergerot como el secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, que ha bromeado con pasar de vivir "en un pisito en Chamberí" a un "dúplex", han acusado a la líder regional de no fiscalizar la gestión de su pareja, Alberto González Amador, investigado por Hacienda.
"¿Por qué cerro el bar de la casa que reformaba mi pareja, antes de que fuera a vivir, cuya placa arriba era de la vivienda oficial de la época de Franco, que tacha con una placa decenas de inmuebles de todo Madrid…? La trama de corrupción del novio de Ayuso", seguía ironizando la presidenta.
A juicio de la presidenta, ni las investigaciones sobre la reforma de la casa de su pareja (en la que ahora vive), ni sus vinculaciones con Quirón Salud son una trama. "Les monto yo una trama con dos de pipas", ha añadido.
Además, Ayuso ha defendido sus contratos con Quirón asegurado que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene más contratos con esta empresa de sanidad privada que toda la Comunidad de Madrid.
Trabajo incansable
Dejando de lado el caso de su pareja, que la presidenta separa de su gestión, Díaz Ayuso ha defendido el trabajo "incansable" de la Comunidad, tomando como ejemplo su viaje a Chile que le ha criticado el socialista Juan Lobato.
"Trabajamos todos los días de manera incansable y, de ahí, que tengamos, sin titubeos, como mínimo, el apoyo de más de la mitad de los madrileños y, además, es un voto cada vez más transversal y me llena de orgullo porque gobernamos para todos los ciudadanos y eso me parece maravilloso: no vamos contra sectores, no vamos por motivos ideológicos contra la gente, no intentamos transformar, imponer…", ha explicado la presidenta.
Frente a ello, Ayuso ha acusado al Gobierno nacional de estar "acorralado por escándalos", sobre todo, "alrededor de la mujer del presidente del Gobierno".
"En nombre de la mujer del presidente de Gobierno, no de un particular, no de alguien que tiene su vida propia, sino de alguien que, de repente, tiene una vida llena de negocios y de business y puede firmar por parte del Gobierno de España, incluso, a quién rescata de sus negocios, ida y vuelta, ida y vuelta, a República Dominicana", ha añadido.