M.T.
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Siguiendo la tradición, el próximo 22 de diciembre tendrá lugar el Sorteo Extraordinario de la Lotería y este miércoles se ha presentado el anuncio, un spot que en palabras de Jesús Huerta, la campaña busca "representar un sentimiento a través de cada persona de la que nos acordamos", reforzando así la idea de "el sorteo que nos une".

Este año, el anuncio narra la historia de Vero y Max, una pareja que se encuentra en un mercadillo navideño un décimo de hace 30 años que está enmarcado. La curiosidad les remueve, lo que les lleva a preguntarse por qué su dueño decidió conservarlo así.

Pero, ¿cuál es el mercadillo en el que la pareja encuentra esta reliquia? Se trata de El Rastro, el mercadillo al aire libre más famoso y tradicional de la ciudad, celebrado cada domingo y festivo en el barrio de La Latina y Embajadores, especialmente en torno a la calle Ribera de Curtidores y la Plaza de Cascorro.

El anuncio de este año tiene, por tanto, ese toque madrileño con una de sus atracciones más destacadas y famosas. El Rastro existe desde hace más de 400 años y nació en torno al antiguo matadero de la villa.

El nombre del 'Rastro' proviene del reguero o 'rastro' de sangre que dejaban las reses sacrificadas al ser transportadas desde el matadero hasta las curtidurías cercanas, donde se curtían las pieles; en este recorrido, la sangre se arrastraba cuesta abajo, marcando el camino sobre la calle Ribera de Curtidores.

El mercadillo se caracteriza por su enorme variedad de puestos, entre los que es posible comprar objetos de segunda mano, antigüedades, libros, muebles, ropa, coleccionismo militar, vinilos, artículos curiosos y alternativos, así como artesanía y obras de arte.

Es un espacio donde tanto madrileños como turistas disfrutan del comercio ambulante y de la cultura urbana, que incluye música en vivo y graffitis.

Además de ser un referente comercial, el Rastro es un símbolo castizo del Madrid tradicional, muestra la evolución histórica de la ciudad y sirve de punto de encuentro para buscar gangas, intercambiar objetos y descubrir piezas únicas e históricas.

Por eso, no es de extrañar que haya sido elegido como enclave en el que se desarrolla el nuevo anuncio de la Lotería de Navidad.