La retirada del amianto en un antiguo almacén municipal de la calle Doctor Esquerdo, 138, ha encendido a los vecinos del barrio de Retiro.
La Asociación de Vecinos Los Pinos del Retiro Sur ha presentado una instancia en el Ayuntamiento de Madrid para exigir "garantías y medidas de seguridad sanitaria" ante unas obras que, según denuncian, se han iniciado sin la información ni la transparencia necesarias.
El colectivo vecinal alerta de que las labores de desamiantado comenzaron este lunes y han sido anunciadas de forma escasa y tardía.
En redes sociales, han compartido una nota informativa distribuida por la zona, en la que se recomienda “mantener las ventanas cerradas y evitar tender la ropa en los patios”. A juicio de los residentes, estas advertencias son insuficientes, teniendo en cuenta la toxicidad del amianto y el impacto que puede tener en la salud.
"Nos sentimos indefensos porque nadie nos ha informado con tiempo. El amianto no desaparece en una hora", denuncia Pilar Jimeno, vecina del número 140 de la misma calle. Jimeno asegura que solicitaron una reunión con la concejala presidenta del distrito, Andrea Levy, pero no han recibido respuesta.
"Creemos que es absurdo hacer esto ahora. Estamos en verano, nos piden mantener las ventanas cerradas de 8 a 15 horas durante tres semanas, mientras que las piscinas colindantes siguen abiertas. Somos 2.000 vecinos afectados", advierte.
Este lunes por la mañana, varios vecinos se concentraron frente al almacén para intentar frenar el inicio de los trabajos. La Policía Municipal acudió al lugar para garantizar que los operarios pudieran acceder al edificio y continuar con la obra.
Desde el Ayuntamiento defienden que "no hay riesgo". Fuentes del Área de Obras y Equipamientos aseguran que la retirada del amianto está siendo ejecutada por una empresa especializada y autorizada que sigue estrictamente la normativa vigente.
Subrayan además que el material es “no friable” —es decir, no se desmenuza fácilmente— y que está siendo encapsulado para evitar la liberación de fibras peligrosas.
La alcaldesa en funciones de Madrid, Inma Sanz, también ha salido al paso de las críticas y ha defendido que se trata de una intervención “necesaria”, ya que el espacio será destinado a nuevas dotaciones para la ciudad. "Es una empresa que cuenta con todos los certificados de garantía. El Área de Obras está en permanente seguimiento de estos trabajos", ha afirmado ante los medios.
Pero las explicaciones no han calmado los ánimos. La oposición llevará el asunto al pleno del distrito de Retiro, que se celebra este martes. Más Madrid pedirá un calendario detallado del plan de actuación y una campaña informativa clara para los vecinos. El PSOE, por su parte, exigirá información sobre la duración de las obras y las medidas de seguridad adoptadas.
“El problema es que las únicas hojas que nos han dejado en los portales ni siquiera mencionan la palabra amianto”, denuncia el concejal socialista Nacho Murgui. La edil Emilia Martínez añade que "las planchas de amianto ya están rotas y hay polvo por todas partes. Es más que probable que haya fibrocemento suspendido en el aire que puede llegar hasta las piscinas".
Los vecinos han anunciado que acudirán "en masa" a la sesión plenaria de la Junta Municipal para exigir transparencia, información previa y garantías de seguridad. “Esto es un tema de salud. Queremos que se nos escuche antes de que continúen con la obra”, zanja Jimeno.