El Chinatown madrileño estará listo antes de que termine el año. El Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida cumplirá así los plazos prometidos. El lugar elegido no podría ser otro que Usera. Basta con salir de su parada de Metro para encontrarse calles adornadas con guirnaldas y rótulos verticales. Casi el 27% de la comunidad china de Madrid se concentra en sus calles. Lo que está construyendo el Consistorio es un itinerario peatonal de 1,7 kilómetros que reforzará la identidad del gigante asiático en la capital.
Más allá de estas obras, la Junta del distrito de Usera intentará de nuevo construir dos arcos chinos después de que el primer concurso público quedara desierto. Esta vez, el presupuesto base de licitación ascenderá a los 475.000 euros (IVA incluido), según avanzan fuentes municipales a Madrid Total. La cifra es más del doble que la que se marcó en la anterior licitación (225.000 euros).
En cualquier caso, se trata de una estimación, ya que todavía se está trabajando en los pliegos del nuevo concurso. Los 475.000 euros son la cantidad máxima que podría comprometer el distrito para este proyecto.
Pese a que no hay más datos sobre los futuros arcos, en la documentación del anterior concurso fallido sí que detallaba lo que se pretendía levantar. La idea era instalar dos paifangs. Uno en la Plaza del Hidrógeno y el otro en la calle Evangelios, donde confluyen las vías Visitación y Porta Coeli. Se trata de un eje que enlaza con la calle Dolores Barranco, donde ya se instaló en 2022 la escultura de un oso panda.
En su día, Cibeles justificó la apuesta por los paifangs poniendo de ejemplo a los de ciudades como Washington, San Francisco, Nueva York, Londres o Liverpool. Un paifang es un arco de madera, ladrillo o piedra. A veces está alicatado con azulejos vidriados. Se erigían en las encrucijadas, templos, puentes, oficinas o tumbas.
Las estructuras están formadas por cimientos, pilares y vigas. Y sus techos cuentan con una curvatura de barrido que se eleva en las esquinas formando crestas decoradas.
El concurso quedó desierto a finales del verano pasado. Por ahora, se desconocen los detalles de la próxima licitación. Solo se sabe el presupuesto estimado.
1,7 kilómetros de itinerario
Lo que sí que está en marcha es la actuación para montar el trazado peatonal, que corre a cuenta del Área municipal de Obras y Equipamientos de Paloma García Romero. Tiene un presupuesto de 8,7 millones de euros y cuenta con fondos europeos. El itinerario conectará la Plaza del Hidrógeno con Madrid Río. El recorrido, tal y como explica el Consistorio, tiene una "doble vocación".
Por un lado, pretende remodelar los espacios públicos que forman parte del itinerario para hacerlos "más habitables". Todo ello siguiendo criterios sostenibles. Por otro, busca reforzar la identidad del barrio como lugar de residencia de una parte importante de la comunidad china. Esto se hará gracias a mobiliario específico y con referencias en pavimentos y señales. Un ejemplo serán los juegos infantiles con forma de dragón que se instalarán en la Plaza de las Tizas.