No es ningún secreto que la relación del Ibex 35 con Pablo Casado era mejorable hasta el pasado jueves. Sin embargo, los empresarios siempre hacen de la necesidad virtud y la importancia de que la consolidación fiscal que habrá que acometer a partir de 2023 sea dictada por un partido de centro derecha era motivo más que suficiente para que el mundo de la empresa estuviera dispuesto a apoyar entre bambalinas al presidente del PP en su carrera hacia la Moncloa.

También en esto, Casado rivalizaba con Isabel Díaz Ayuso. Su compañera de las juventudes del PP no solo cuenta con una excelente relación con Ana Botín, sino que con sus políticas en la Comunidad de Madrid -tanto en materia de impuestos como en la gestión de las restricciones durante la pandemia- y su capacidad para neutralizar a Vox con una mayoría suficiente para gobernar en solitario han hecho que se gane el apoyo de una parte importante del poder económico. No solo entre las grandes empresas. También con las pequeñas.

El 'efecto Ayuso' se dejó notar en la tensa votación que hubo en la CEOE para la reforma laboral. CEIM (Confederación Empresarial de Madrid) protagonizó una de las sonadas abstenciones ante el acuerdo entre la patronal, los sindicatos y el Gobierno. El representante de los empresarios madrileños, Miguel Garrido, fue una de las voces más críticas ante ese pacto contra el que también se posicionó Foment, aunque por cuestiones distintas.

Isabel Díaz Ayuso y Pablo Casado.

Isabel Díaz Ayuso y Pablo Casado. EL ESPAÑOL Invertia

Sin embargo, no pierdan de vista una cosa: Garrido tiene buena relación con Vox y no lo oculta. De hecho, Rocío Monasterio ha acompañado al presidente de los empresarios madrileños en algunos desayunos informativos. Y además, han mantenido reuniones para intercambiar ideas sobre las políticas económicas en Madrid.

Fue elocuente cómo el pasado diciembre a Antonio Garamendi le salió un espontáneo "lo ha hecho genial" en el programa de Ana Rosa cuando le preguntaron sobre la presidenta de la Comunidad de Madrid en la gestión de la pandemia.

Semanas más tarde, el líder de la CEOE se veía obligado a recurrir a The Beatles para echar un capote a Casado y tratar de mostrar ante la opinión pública que su relación con el presidente del PP no era mala. Fue en enero, cuando los empresarios intentaban sacar al PP la abstención para la reforma laboral que iba a votar el Congreso. Con sus conocidos dotes de diplomacia, el líder de la patronal sonrojó al presidente del PP al decir en público que igual debían mostrar la paz que existe entre ellos con una imagen como la que ilustra la balada de John Lennon y Yoko Ono en la cama de un hotel. Pero lo que había tras aquellas palabras era más bien, una antibalada que venía de atrás. Y si no, recuerden el episodio de los indultos.

Con este telón de fondo, la voladura desde dentro del Partido Popular por una guerra cruel por el poder que es contraria a los intereses de España preocupa mucho, como es lógico, a los empresarios. 

Tras los graves errores en la gestión de la información sobre los pagos de Tomás Díaz Ayuso y el golpe de las elecciones en Castilla y León, el liderazgo de Casado se tambalea. Pero también ha quedado debilitada la presidenta de la Comunidad de Madrid por su resbalón como mínimo en el in vigilando en este caso que ha resucitado los fantasmas de la corrupción asociada a la única alternativa que había al Gobierno del PSOE y Unidas Podemos.

Quién iba a decir al Ibex 35 que iba a acabar viendo a Pedro Sánchez como el garante de la estabilidad de España. Ahora, la preocupación se centra en retener a Nadia Calviño para que no haga las maletas destino a algún cargo relevante en algún organismo internacional para que la vicepresidenta primera siga en el Gobierno.

No ha pasado tanto tiempo desde aquel 2019, en el que la CEOE presionaba de forma activa a Albert Rivera para que pactara con Sánchez con el fin de evitar la entrada de Pablo Iglesias en el Gobierno. Sin embargo, parece que estos tres años sean una eternidad.

Dicen las malas lenguas que lo que le ha pasado a Rivera en su fracaso con el despacho Martínez Echevarría ha sido la factura de su 'no' a Sánchez a la hora de pasearse por los despachos del Ibex 35 en busca de clientes. "Todos saben que si ahora se tienen que entender con Yolanda Díaz es por culpa de Rivera y después de la salida de Ciudadanos de los gobiernos autonómicos, el poder económico no quiere cuentas con él. No le deben ningún favor", resume una fuente que conoce bien al exlíder de Ciudadanos.

Pedro Sánchez, Miguel Garrido, Nadia Calviño, Antonio Garamendi, Isabel Díaz Ayuso, Pablo Casado, Alberto Núñez Feijóo, Rocío Monasterio, Alberto Casero.

Pedro Sánchez, Miguel Garrido, Nadia Calviño, Antonio Garamendi, Isabel Díaz Ayuso, Pablo Casado, Alberto Núñez Feijóo, Rocío Monasterio, Alberto Casero. EL ESPAÑOL Invertia

Llegados a este punto, pueden hacer quinielas para ver a quién apoyará el poder económico en esta guerra. Hasta Inés Arrimadas puede tener un papel clave en este nuevo capítulo que se abre para la política española después de que su 'sí' a la reforma laboral fuera determinante para que España pueda presentar en Bruselas este hito. Imposible recordar en este punto que también ayudó a ello el error de Alberto Casero.

En el mundo de la empresa, ya hay quien mira a Alberto Núñez Feijóo para sacar al centro derecha de esta situación límite.

El suicidio por el liderazgo del PP también tiene otra lectura importante en el mundo empresarial. A finales de este año, la CEOE celebra elecciones y se votará por la continuidad de Garamendi. Determinados sectores -descontentos con sus cesiones al Gobierno- andaban buscando un candidato alternativo para la presidencia de la patronal.

Sin embargo, en un escenario en el que Sánchez parece llamado a ser el garante de la estabilidad de España, se confirma que la estrategia seguida por la patronal en los últimos meses no ha sido desacertada. Han conseguido una voz en las negociaciones y un marco laboral que consolida el espíritu del que se dibujó en 2012. Se han llevado unos cuantos golpes con el SMI o la subida de las cotizaciones sociales. Pero el miedo ahora es qué pasará en materia fiscal.

En unas semanas, el comité de expertos de María Jesús Montero presentará su propuesta de reforma tributaria con el impuesto de sociedades y el modelo fiscal de Madrid en el punto de mira. Frente a ese documento, ya nadie espera que esté el PP.

ATENTOS A...

Este lunes aterriza en Madrid la comisaria de Energía, Kadri Simson, y la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, aprovechará la visita para volver a pedir a Bruselas que mueva ficha e intervenga el mercado eléctrico para limitar el precio máximo del kilovatio que paga el consumidor.

Teresa Ribera y Kadri Simson.

Teresa Ribera y Kadri Simson.

Hasta ahora, la política europea con el problema del recibo de la luz ha sido la de que 'cada país aguante su vela'. No se esperan grandes cambios en el horizonte. Pero Ribera ha generado expectativas sobre esta visita al afirmar que pronto habrá "acontecimientos europeos" que ayudarán al Gobierno de España en su empeño por contener la factura de la luz.

En todo caso, no las tiene todas consigo. De hecho, fuentes del sector aseguran que sigue haciendo números para reducir los costes del sistema eléctrico rebajando la parte regulada del recibo de la luz que pagan los españoles.