A pesar de ser una micropyme dedicada hasta 2018 solo a las auditorías, Value & Bro ha cerrado un contrato millonario con el Gobierno de España por importar del mercado chino 700.000 unidades de hisopos (bastoncillos para recoger muestras) para el diagnóstico del coronavirus.

La abogada Paola Martínez Ledesma está detrás de esta empresa malagueña. ¿Cuál ha sido el secreto para hacerse con una licitación valorada en más de cinco millones de euros desde una humilde micropyme? “He estado en el momento adecuado, en el lugar adecuado y con la posibilidad de ganar dinero”, explica a Invertia.

Desde el principio de la conversación con Invertia, Martínez Ledesma niega todos los rumores surgidos esta semana que apuntan a que habría logrado la millonaria licitación gracias a presuntos contactos o amistades en el Gobierno o en el PSOE. “Se dice de todo de mí estos días, incluido que tengo algo que ver con la compañía que trajo las mascarillas defectuosas”, explica.

Pero nada más lejos de la realidad. Según explica Martínez Ledesma, su empresa ha seguido todos los cauces y ha presentado todas las garantías legales para obtener el millonario contrato. “No es algo que se tramite de un día para otro. La licitación pasa muchos controles”, entre ellos haber acreditado y certificado convenientemente los productos ofertados, en este caso los hisopos chinos.

Explica que dentro de esta documentación también “hay que acreditar qué empresa está fabricando el producto” (en este caso Guangzhou Deaou Bio-Technology) y el Ministerio de Exteriores “tiene que certificar que esa fábrica existe”.

Demuestra ser experta en el proceso. No es la primera vez que lo afronta. Value & Bro se ha postulado ya en varias ocasiones a ser proveedor del Ministerio de Sanidad. “Hemos presentado ofertas de todos los productos en los que hemos podido, como las mascarillas”, unas que, reitera, no tienen nada que ver con las defectuosas que fueron objeto de polémica esta semana. Nuestro material hasta ha pasado por el examen del Instituto Carlos III”.

Sorpresa

Admite que cuando supo que su oferta había sido la seleccionada se "sorprendió”. Pero esto no condujo a ningún tipo de improvisación.

A pesar de que el Registro Mercantil no lo refleje aún, Value & Bro se dedica a la importación de productos sanitarios y de protección. Concretamente, lo hace desde marzo de 2019, una actividad que le ha permitido convertirse en suministradora tanto de empresas como de diputaciones provinciales en Andalucía, así como de hospitales y farmacias

Indica que su equipo (aunque solo tiene un trabajador, cuenta con la colaboración seis agentes comerciales con presencia en España, China y Latinoamérica) estaba alerta por la evolución de la crisis sanitaria en Italia. “He tenido la suerte de contar con gente muy profesional y con que tenemos en Hong Kong gente de confianza que trabajaron en estas cuestiones cuando se produjo la crisis de la gripe aviar en China. Así que están preparados para estas situaciones”.

Con todo, la situación en el mercado chino es excepcionalmente complicada. “La normativa fluctúa constantemente y hay que adaptarse continuamente”.

Y a las complicaciones regulatorias se suma la competencia de otros compradores. En el caso de hisopos para el diagnóstico de Covid-19, explica que su empresa tuvo que aceptar los precios que dicta el mercado a día de hoy (muy por encima de los habituales, según fuentes del sector sanitario) ybloquear la producción del laboratorio para traérnosla nosotros, porque llegaban americanos e ingleses ofreciendo el triple. Así es como está funcionando el mercado allí”.

Beneficios

Madre de cinco hijos que combina su labor legal con la gestión de Value & Bro, esta abogada con doble nacionalidad (argentina y española) admite sentirse “afortunada”. Su margen de beneficio será por traer los hisopos (todavía no han llegado a España; el primer pedido sale el próximo viernes de China) será del 10% tras el pago de impuestos y a los ‘broker’, es decir, los agentes comerciales con los que colabora.

Los negocios no le deben ir mal puesto que acaba de donar 10.000 mascarillas a la Diputación de Málaga. Con todo, matiza: “Esto no es una ONG, sino una pequeña empresa, que a lo mejor en el futuro ya no será tan pequeña. Si hacemos las cosas bien, nuestra idea es seguir en el sector”. Pero avisa de que no lo va a tener fácil : indica que tras su recién adquirida fama, la empresa que le hacía pedidos de manera más periódica ha decidido prescindir de ella.

Noticias relacionadas