Vivendi lo tiene claro: quiere crecer en el mercado audiovisual español y su desembarco en Prisa como segundo accionista es solo el primer paso de un proyecto global. Un plan que pasa por tener en el medio plazo un canal de televisión de TDT en abierto en España. 

Las fuentes consultadas por Invertia indican que el proyecto es conocido por fuentes gubernamentales, tras la reunión del CEO de Vivendi con Pedro Sánchez hace dos semanas. Como ya informó Invertia, en ese encuentro Arnaud de Puyfontaine transmitió al Presidente el interés del dueño de la compañía, Vincent Bolloré, de ser un inversor a largo plazo en España.

También le trasladó su voluntad de seguir creciendo en Prisa tras comprar las acciones de HSBC y llegar al 9,9%, aunque nunca se refirió a cifras concretas de participación accionarial. De Puyfontaine también comentó a Sánchez el interés de los franceses de invertir en el mercado audiovisual español, sector donde el Gobierno prepara una serie de ventajas fiscales para la llegada de inversores extranjeros.

¿Cómo lo harán? Este diario ha confirmado que uno de esos proyectos es tener un canal de televisión en España en abierto. Una frecuencia que se sumaría a las sinergias audiovisuales con Prisa y eventuales pactos con Telefónica, con quienes ha formado junto a Amber el nuevo núcleo duro accionarial de la compañía española.

La cuestión es de qué manera podría quedarse Vivendi con una TDT en España. Las fuentes consultadas por este diario centran estas posibilidades en que alquile uno de los actuales canales de TDT en antena, ya que en está descartado que el Gobierno lance a concurso nuevas frecuencias, como ya lo hizo el de Mariano Rajoy en 2015.

Incapacidad técnica

Tras el segundo dividendo digital y la cesión del espectro de 700 MHz para el 5G, se hace imposible la asignación de nuevas frecuencias y, por tanto, de un nuevo concurso. "No es posible planificar, y mucho menos coordinar internacionalmente, ningún múltiple digital adicional", dicen técnicos del Gobierno a Invertia.

Estas fuentes explican que para mantener todos los múltiples digitales que había en el Plan Técnico anterior, se ha tenido que hacer una planificación muy eficiente que ha requerido de más de dos años y una gran cantidad de reuniones bilaterales.

Agregan que tras la liberación de la banda 700 MHz en Europa se ha planificado un total de seis múltiples digitales, mientras que en España se han mantenido los ocho múltiples digitales que había, además de los múltiples de TV digital local. Incluso si Pedro Sánchez quisiese hacer un concurso, no podría ejecutarlo porque no hay sitio para nuevos canales.

¿Y quién podría alquilar un canal a Vivendi? A finales del 2015, el Gobierno realizó el último gran concurso de televisión en abierto en España, adjudicando seis frecuencias a Atresmedia, Mediaset, Real Madrid, Kiss Media, la Conferencia Episcopal y Secuoya. Actualmente las cadenas que operan en estas frecuencias son Atreseries, BeMad, Real Madrid TV, DKiss, Trece, Ten.

De ellas, Kiss Media tiene un acuerdo con Discovery para realizar contenidos conjuntos en DKiss, el mismo formato que Secuoya y Mediapro utilizan en Ten. Son, a priori, los acuerdos que podrían estar en el punto de mira de Vivendi, ya que Atresmedia, Mediaset, la Conferencia Episcopal y el Real Madrid han manifestado su interés de estar en el mercado a largo plazo.

Cadenas de TDT

Entre las cadenas de TDT también hay otros dos grupos con licencias de televisión que no las explotan directamente. Vocento tiene cedidas sus frecuencias a Paramount Channel y Disney Channel, mientras que Unidad Editorial hace lo propio con Gol Televisión (Mediapro) y Discovery Max.

Técnicamente, la ley española prohíbe alquilar o ceder licencias de TDT ya que se considera que es una concesión pública de uso exclusivo del adjudicatario, pero hay fórmulas para que una gran major se instale en España, como ha sido el caso de Disney, Discovery y Paramount. 

En el caso de DKiss, Ten y Gol, el acuerdo de explotación es mediante la firma de un contrato de producción preferente, mientras que Vocento ha dado entrada minoritaria a los grupos internacionales en su sociedad constituida para explotar licencias de televisión. 

De esta manera, las opciones de Vivendi pasan por llegar a un acuerdo con estos grupos mediáticos buscando alguna fórmula de colaboración a largo plazo. Para nadie es un misterio que la forma de rentabilizar estas pequeñas cadenas de televisión es logrando un gran acuerdo con una multinacional de los contenidos.

La idea es que estos grupos aporten mucho producto enlatado y que genere pocos costes de producción en España, un modelo que en el grupo francés Vivendi ve con buenos ojos.

Noticias relacionadas