Mensaje de aliento a los emprendedores y llamada a la responsabilidad en el uso de la inteligencia artificial. Esa ha sido la llamada a la acción que el Rey Felipe VI ha elevado a los asistentes al South Summit 2025, una cita en la que el monarca ha reconocido el valor de las startups a la hora de impulsar proyectos innovadores en un entorno tan volátil como el actual.
"El contexto internacional ha cambiado profundamente y los emprendedores tenéis que tomar decisiones de manera cada vez más rápida en un mundo plagado de incertidumbre. Pero esa misma incertidumbre puede ser fuente de oportunidades, para innovar y favorecer la transformación de la economía", ha afirmado Felipe VI.
El Rey ha destacado el "enfoque práctico y realista a los retos; abierto e internacional" de los emprendedores. Una profesión que, en su opinión, "implica estar siempre en movimiento, estar a la vanguardia de la tecnología y las necesidades de la sociedad para crecer como empresas, como personas y como sociedad".
En presencia del ministro de Transformación Digital, Óscar López, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, Felipe VI ha subrayado que España se esté "consolidando como un referente del emprendimiento europeo y más allá del Atlántico, siendo el séptimo país en inversión en startups y el cuarto en número de operaciones".
Proyectos emprendedores que, cada vez más, tienen la inteligencia artificial como común denominador. Respecto a esta tecnología, el Rey ha explicado que "la IA ha dejado de ser una promesa para ser un motor clave de innovación, escalabilidad y de ventaja competitiva. Hay pocos procesos que no se vayan a ver afectados por ella, pero España está generando talento y posicionándose en su uso en salud, ciberseguridad o procesamiento de lenguaje natural".
De ahí esa llamada a su uso ético y equilibrado. Felipe VI ha pedido "poner la tecnología al servicio del bien común, que su desarrollo sea responsable y centrado en las personas. Hay muchas preguntas fundamentales sobre su impacto social, sobre sus efectos sobre el empleo, privacidad y sesgos. Preocupaciones que todos compartimos y que debemos abordar, no sólo con regulación, sino también innovación con propósito, formación y responsabilidad compartida entre empresas, administraciones y ciudadanos".
Una receta que, para el monarca, debe llevarnos a una filosofía de país que nos adentre en esta revolución industrial. "Una España que no tema a la inteligencia artificial, porque sepa guiarla con inteligencia humana", concluía.