J. A.
Publicada

La tecnología está cada vez más presente en nuestras playas. Robots limpiadores, sensores, incluso cámaras con visión inteligente empiezan a formar parte del paisaje de los principales destinos de costa.

Y algunos de esos destinos empiezan a explorar ya una herramienta tecnológica que tiene mucho de estratégica: los gemelos digitales.

Un gemelo digital permite tener una imagen completa de lo que está sucediendo en una determinada zona. No en referencia a la actividad propiamente dicha sino a la información procedente de los datos que se mueven en ese ámbito. Y eso es lo mismo que decir que se facilita la toma de determinadas decisiones.

Hace unos meses, ya dábamos cuenta en DISRUPTORES de un proyecto desarrollado en las costas de Cantabria que tenía un interés turístico a la par que medioambiental. Era el proyecto CICLOPE y consistía en desarrollar un gemelo digital que diera respuesta a la falta de previsión de los efectos de los vertidos de los sistemas de saneamiento, especialmente durante episodios de lluvia.

Otro de los destinos turísticos por excelencia es Baleares. También allí han decidido apostar por un gemelo digital.

El gobierno de Baleares ha puesto en marcha un proyecto estratégico y disruptivo en la gestión del litoral del archipiélago: la creación de un gemelo digital de la realidad costera. Esta herramienta, basada en tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y el análisis de datos, forma parte del programa TriRuralTech y se inscribe dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado con fondos europeos Next Generation.

Con un presupuesto total de 4,6 millones de euros, de los cuales el 75% proviene de los fondos europeos, el proyecto prevé desplegar una infraestructura tecnológica que permita simular y monitorizar en tiempo real diferentes escenarios ambientales y sociales en el litoral balear. Esos gemelos digitales representarán digitalmente entornos reales para mejorar la toma de decisiones, optimizar recursos y favorecer un turismo más sostenible.

Tres grandes pilares tecnológicos

El proyecto se fundamenta en tres componentes principales: la creación de un espacio de datos interoperable, que permitirá compartir información entre administraciones, empresas, centros de investigación y ciudadanía, garantizando la seguridad y la soberanía de los datos; una capa de conocimiento para procesar y analizar los datos en tiempo real, generando conocimiento útil para la gestión pública; y la plataforma propia del gemelo digital, desde donde se visualizarán y simularán escenarios para anticipar problemas, priorizar inversiones y ajustar servicios públicos como aforos o ciclos del agua.

Durante 2025 se desarrollarán dos casos de uso: el control de aforos en las playas y la gestión del ciclo del agua en zonas costeras. A partir de 2026, con fondos propios, se añadirá un tercer caso: la gestión integral de la seguridad y la asistencia médica a la costa.

El proyecto, liderado por la Dirección General de Innovación y Transformación Digital, se dividirá en tres fases: una de preparación, una de ejecución y una tercera de transferencia y consolidación.

Ese proyecto situará a Baleares en la vanguardia europea de la digitalización territorial. Además de mejorar la gestión costera, la iniciativa quiere ser un catalizador para el emprendimiento tecnológico en entornos rurales y marinos, creando sinergias entre el ámbito público y privado.

Con esa apuesta por la innovación y la sostenibilidad, el gobierno balear pretende dotarse de herramientas inteligentes para afrontar los retos ambientales, turísticos y sociales del siglo XXI, aprovechando los fondos europeos para transformar la gestión pública y reforzar el ecosistema digital de las islas.