Esta semana, la firma de análisis IDC daba a conocer sus principales tendencias TIC para el próximo curso, constatando una aceleración del gasto y una notoria madurez de la transformación digital del tejido empresarial patrio. Pero, entre cifras y porcentajes de lo más diversos, pasó casi desapercibido un extraordinario cambio de paradigma, que sobrepasa nuestras fronteras y afecta no al corazón, pero sí al sistema inmune de toda la economía digital. 

Hablamos de la ciberseguridad, un mercado en pleno apogeo (se prevé un crecimiento del 7% de esta particular industria, con 1.307 millones de euros invertidos en 2019) al calor del incremento de las ciberamenazas -como ha recogido la firma McAfee en sus previsiones presentadas también estos días en Roma- y de los temores a la ciberguerra, por un lado, y al cumplimiento normativo -con GDPR por bandera- por otro.

Nada nuevo hasta aquí, pero IDC también señala una tendencia no tan halagüeña para los actores de este subsector: la transición de los productos de seguridad especializados a propuestas como servicio, integradas y gestionadas directamente desde la nube, hará que el número de empresas de ciberseguridad decaiga en un 40% de aquí a 2023. Eso implica que los proveedores de seguridad medianos o muy especializados lo tendrán muy complicado para sobrevivir en un contexto donde podríamos ver concentraciones y  fusiones en dirección a grandes corporaciones donde la seguridad será una capa más de su propuesta de servicios.

Entre los nombres que podrían verse afectados por este proceso encontramos marcas conocidas en el mercado, pero ninguna de estas posibles operaciones resulta sencilla. McAfee acaba de pasar por el proceso opuesto tras su independencia de Intel, mientras que Kaspersky Lab, ESET o Check Point tienen un protagonismo destacado de sus fundadores, con lo que no resultaría sencillo convencerles de vender su compañía.

Mario García, director de esta última para España, está de acuerdo con las previsiones de IDC ("hay miles de empresas ahora mismo, quedaremos 20 al final") pero descarta que la suya pueda ser una de las afectadas. "Nosotros ya colaboramos activamente con los actores cloud", defiende.